Categoría: Metafísica

Empodéra-t: ¡iré hacia eso riendo!

No sé muy bien lo que me espera, pero de cualquier modo, iré hacia eso riendo.

Stubb, en Moby Dick.

A) Leyendo entre líneas a Moby Dick.

«[…] la vida de los que viajan en el Pequod no vale gran cosa en opinión de los que se encuentran al mando y la tripulación es plenamente consciente de ello. La total ausencia de empatía del capitán Ahab hacia sus semejantes se puede observar ampliamente en las decisiones que va tomando a lo largo de todo el relato. Solo quiere satisfacer su propio proyecto, y para ello está dispuesto a sacrificar a todo y a todos los que, paradójicamente, colaboran en su consecución».

¿Os suena esto si cambiamos protagonistas y colocamos a los actuales poderes políticos y económicos; si como barco ponemos el capitalismo radical que ha decidido sodomizarnos a nosotros y al planeta? Continúa Uriondo: «Nosotros, como habitantes del Pequod planetario, cuando interpelamos a los amos del mundo si esto es lo normal, recibimos permanentemente la respuesta de ‘esto es lo que hay y si no te gusta, salta del barco». Son párrafos entresacados de un maravilloso artículo titulado Un día en el Pequod (planetario)« (Ruíz, 2013).

En el sistema Capitalista, donde se disfraza el lobo de carnero, el que desfalca camina libre y el ladrón de tres al cuarto anda preso, donde te venden una democracia que cuesta verla hasta en el voto electoral, donde la justicia parece apretarse más la venda cuando más tela hay envuelta; existe un dios: el «dios dinero«.

En el sistema Capitalista vive una intención: la de hacer coincidir, en el dinero, la abundancia. Sin embargo, cada vez estamos todos más cerca de ir comprendiendo que este «dios dinero» no nos provee abundancia, tampoco el «dios dinero» es dador de la justicia y mucho menos lo es de la igualdad y la fraternidad entre las gentes.

Hoy día, cuando un parón tras otro nos ha revelado la importancia de la humanidad, de ser humanos; bien se hacen merecedoras estas frenadas en seco de surcar y bucear aquellas aguas por las que navegamos. Tal vez, con las circunstancias que vivimos hoy, y con la observación de muchos ojos, alcancemos un conocimiento más profundo de aquellas aguas que requieren esclarecerse.

Así, el trabajo que se va ir publicando progresivamente va estar incardinado en la intención de «pasteurizar la economía al completo«: someterla a un proceso térmico (elevarle la temperatura a aquello que se haya escondido en el hielo – habrá que derretirlo para poder ver -) para lograr reducir la presencia de agentes patógenos (tramas, corrupción, normas que se contradicen, falacias, fraude, fiascos…) consecuentemente.

Tal vez, en el proceso de pasteurización que se vaya acaeciendo haya otro proceso paralelo en nosotros mismos que nace del entendimiento de la situación y de cómo este nuevo conocimiento nos transforma. Tomemos siempre la olla de este trabajo desde las asas de la bondad y del rigor, aunque sujetemos más vigorosamente su asa amable, especialmente para con nosotros mismos – ya hemos sufrido bastante -.

B. Nuestro amor: nuestra potencia.

El solo hecho de considerar que la reducción de «presencia de agentes patógenos» se produce consecuentemente nos mueve a considerarlo como un acontecimiento del devenir de esta sola proposición. Sin embargo, ¿se deduce lógicamente que este hecho es inevitable y se deriva de esta «pasteurización«? Porque, la verdad, hasta el momento todos nos hemos encontrado con muy plurales observaciones, críticas y análisis con respecto a nuestro entorno más inmediato y, sin embargo, no han terminado por mover a la población en el cambio. De hecho, lo anhelamos.

Aquí es donde encuentro la potencia que posibilita la transformación. Si bien la pasteurización es un acto per se, no termina de realizarse y, por tanto, existir entre tanto no existe una potencia que lo mueve a ser. Y, adicionalmente, para ser potencia no necesariamente se ha de estar activamente actuando. Esto es, no porque dejamos de caminar se pierde la potencia de poder hacerlo.

Si bien no hemos caminado hacia el cambio, no quiere decir que no poseamos la capacidad de poder hacerlo; si bien no somos constructores activos de un barco, no quiere decir que no poseamos las destrezas para poder construirlo. Luego nuestra potencia está y es; el acto le deviene.

¿Estará en nuestra unión nuestra potencia? El adagio de la unión hace la fuerza ha viajado bastante a lo largo del tiempo, es muy probable que sea cierto. Tal vez, la sola escucha y observación atenta a lo que verdaderamente acaece a nuestro alrededor encienda nuestra potencia y nos mueva a ser constructores activos; desde luego que ya contamos con las herramientas. Y éstas son nuestra pasión por la vida y crecer, nuestro amor: nuestra mayor energía.

¿Será nuestro amor nuestra potencia?

Es bueno recordar siempre que somos energía y vibramos: somos luz. La ciencia, en este sentido, demuestra que los ambientes sosegados y armoniosos nos devuelven cristalizaciones de los átomos de la materia de proporción áurea. ¿Ocurrirá lo mismo con nuestro bienestar físico, mental y emocional?

Es muy probable que nuestra sola pasión por vivir y crecer termine por unirnos como humanidad; aflorando, a su paso, todo aquello que ha impedido nuestro crecimiento y acercamiento en tolerancia.

Tal vez, el solo hecho de aflorar aquello que nos impide brillar nos mueva hacia la manera y modo de hacerlo; haciendo a un lado, consecuentemente, todo aquello que nos lo ha impedido.

Dejémoslo por el momento en «todo aquello«; pues, como vemos, más y más son los mapas del territorio a los que vamos teniendo acceso, más es que vamos cambiando nuestra mente y nos reconducimos en alterar nuestro pensamiento.

Así es que se nos encienden el amor propio y hacia el prójimo y sabemos subrayar qué es aquello que se presenta inaceptable e intolerable. Este solo acto que deviene en nuestra potencia nos une; luego, es un efecto expansivo eso de educarnos emocionalmente y en sentido crítico. Esto es quererse así mismo, este es el principio del amor. Empieza en uno mismo, ¿si no te quieres a ti mismo, crees que puedes querer a los demás? ¿Si no estás feliz contigo mismo, crees que puedes estar feliz por los demás? ¿Si no sientes alegría por tus habilidades y capacidades, crees que puedes sentir alegría por las de los demás?

C. Hacia el cambio.

Si nos cuesta trabajo cambiar es bueno tener presente que nuestro pensamiento, nuestra manera de pensar, simplemente surge de las construcciones mentales que hemos ido edificando y guardando desde nuestra propia interactuación en nuestras propias experiencias; es el devenir de nuestro aprendizaje. Ni que decir tiene que medio, agentes, circunstancias, actitud, emociones particulares vividas…condicionan tanto la experiencia como la interactuación y, por ende, nuestro propio aprendizaje.

En nuestro intento de racionalizar las cosas que experimentamos y sentimos, no solo aprendemos, sino que el aprendizaje que le deviene nos conduce a construir «creencias» en torno al mismo y nuestro hábito en dichas creencias termina por forjar, no solo nuestros constructos y atajos mentales, sino, por igual, nuestra personalidad y conducta.

Así es que cuesta trabajo cambiar la mente, cambiar nuestras creencias, es un proceso que requiere del hábito en el nuevo aprendizaje. De lo que no cabe duda es de que todos albergamos el poder y la capacidad de cambiar. Nuevo conocimiento y nuevas experiencias nos dejan nuevos aprendizajes y, con ellos, es que logramos renovar nuestras creencias y desde el hábito en las mismas es que transformamos nuestra conducta y, tal vez, algo en nuestra personalidad. Es bueno tener presente que nuestra personalidad, aunque es marcada, es flexible.

Es bueno tener presente que si queremos cambiar algo en nuestro entorno desde luego que ha de empezar el cambio en nosotros mismos. No podemos estar señalando paja en el ojo ajeno cuando en los nuestros llevamos vigas. Esto es, no podemos analizar el entorno y apreciar incongruencias que descalificamos si, a su vez, nosotros mismos participamos de la incongruencia. ¿Habremos de ser congruentes como paso previo?

Como dijo Confucio: ¡ya estoy harta!

Aquí empieza el cambio, en uno mismo. El solo hecho de abrirte a cambiar, a mejorar algo de ti, lleva implícitamente tu autoexploración y tu voluntad por hacerlo. Y la voluntad, después de todo, es movida por el deseo a conseguir algo que apreciamos con singular belleza. Así es que nos entusiasma y nos motiva hasta su logro.

La caridad empieza por casa.

Proverbio chino.

D. ¡Iré hacia eso riendo!

El pensamiento es un acto, una consecuencia de nuestras circunstancias; nuestra potencia es la capacidad de alterarlo. Aquí estriba nuestra inteligencia emocional muy profundamente; pues, como humanos, pensamos que siempre elegimos la mejor opción. Es algo ligado a nuestro instinto de supervivencia.

Mas, tal vez hemos hecho elecciones desde el desconocimiento, la desinformación o sin ser conscientes de que había un vicio agazapado. Es por esto que bucear es bueno. Es bueno ser críticos, es bueno cuestionarnos las cosas, es bueno reconducir nuestra conducta, es bueno ser reflexivos, es bueno ser serenos, es bueno saber escuchar, es bueno saber estar atentos; es bueno para nuestro crecimiento y para vivir felices. Como poco, con estar atentos estamos despiertos y mejor miramos los mapas que, a nuestro paso, encontramos del territorio. Mas, con estar serenos, es que terminamos hasta por «baliar» y reír por el camino.

De esta manera, y volviendo al mapa económico y social y a nuestra intención de abrirnos a un nuevo camino que se hace a nuestros pasos, lograremos ver qué es el dinero y el cuento de las cien zorras que nos han ido vendiendo a lo largo de la historia con el mismo y alrededor del mismo. Después de todo, el «dios dinero» desde que existe ha venido condicionando cada mapa del territorio, hasta el de nosotros mismos.

Por ser simples, conociendo cómo se organiza una sociedad y para qué fin, conociendo sus medios y herramientas, así se alcanza el entendimiento de la verdad de las cosas, de la verdad de lo que nos rodea.

Al menos, si no queréis llamarlo «verdad«, ya que se asocia con la realidad y ésta siempre es subjetiva, vamos a llamarla: alcanzar el conocimiento del territorio. Porque una cosa es el territorio y otra cosa es el mapa que cada uno tiene del territorio.

Así, cuando se logran juntar más mapas, más información se consigue del territorio. Podemos tener: el político, el físico, el callejero, el turístico, el histórico, el climático, el de temperaturas, el atmosférico, y, hasta el del tesoro.

No está marcada en ningún mapa: los sitios de la verdad no lo están nunca.

Moby Dick

De esta manera, ¿conoceremos mejor el territorio si más mapas diferentes, de él, tenemos? Esto, de asimilarlo con la visión personal o la opinión, nos viene a decir que en el mar de las opiniones siempre encontramos conocimiento de aquellas cosas que, en todo, se pueden ir mejorando en esa tendencia infinita que es la del aprendizaje que nos dejan las mismas desde el diálogo, la tolerancia, la pluralidad de visiones y, por supuesto, la experiencia.

De considerar aquellas Organizaciones, Instituciones y sus funcionamientos y objetivos – por ser breve- , un entendimiento de las mismas, cada vez más profundo, nos conducirá a ir conociendo mejor el territorio que pisamos.

De esta manera, lo mismo hasta construimos un nuevo barco entretanto avanzamos por un nuevo camino que hacemos todos a nuestros pies.

Recordemos siempre que el gran mal de la humanidad es la ignorancia. Pues, ya sabéis…vamos a procurar todos estar satélites con las cosas y no permitir que las normas y nuestro derecho, y las intenciones de nuestros organismos e instituciones, se contradigan u opriman u hostiguen nuestro bienestar.

Para empezar, esto es velar por que se cumpla la norma y la intención de Bienestar Social y de Desarrollo Sostenible Mundial que estos mismos organismos y derechos promueven abanderándose de la democracia, la igualdad, la libertad y la fraternidad que quieren para la humanidad. Con lo que, de estar satélites, somos ciudadanos con ese sentido crítico que promueve nuestra legislación educativa europea, nacional y supranacional y – como poco – somos ciudadanos ejemplares y participativos.

¡EL CONOCIMIENTO ES PODER Y EL AMOR ES SU POTENCIA!, ¿se hará esta afirmación un adagio en el tiempo?

Un beso

por Verónica García-Melero


in-דice

Aristóteles, Calvo, T. (Tr.), RBA Libros, S.A. (Ed.) (2014) Metafísica. Volumen Original: Biblioteca Clásica Gredos, 200. Barcelona: RBA Libros, S.A.

La Alquimia del Pastel y Fiasco.

Artículo Reeditado. Publicado Originariamente el 17 de Abril de 2020.

Adán, dábale arroz a la zorra; el Abad, nada.

Palíndromo español «tuneado».

A. Introducción.

¿Por qué utilizar la «Maritoñi» para este artículo? ¡Madre mía!, para mí fue un verdadero fiasco, y no la Maritoñi – que está exquisita -, sino el pensar que se hacía por toda España. ¡Qué desengaño!

La legendaria M

Para que me comprendáis, os voy a compartir una anécdota de cuando estudiaba en la facultad. Era mi primer año y, de éstos días que se me apeteció algo dulce, se me pasó la «Maritoñi» por la cabeza.

Habíamos bajado a desayunar todo el grupo de compañeras cuando me preguntan: «¿Vero, tu qué te vas a pedir?». A lo que contesté: «Hoy quiero comerme una Maritoñi». De repente hubo risas, bastantes y… algo, entre dos aguas – ¿qué es lo que querrá decir? -, recuerdo que me preguntaron – como si fuera hoy -: «¿Una «Maritoñi»?, ¿qué es una «Maritoñi»?»… La cuestión es que me quedé muy extrañada, ¿cómo no iban a saber qué son las «Maritoñis», que son «mega» conocidas en «Graná«?… Terminé explicándoles qué y cómo son, algo que causó curiosidad; con lo que, en una de mis vueltas a casa, me hice de una cajita de «Maritoñis» para presentarlas en Sevilla.

La «Chocotoñi«…la Maritoñi de chocolate. Está buenísima.

Así, evocando un desengaño personal, además de ser el pastel que ahora después apreciaremos; ¿por qué no utilizarlas en esta entrada como anécdota e icono de los dulces de Granada?

Es más, hasta podría valer el artículo para sugerir que, dada su exquisitez, bien podría plantearse algún otro empresario de España fomentar el consumo de la «Maritoñi» a nivel nacional, utilizar supermercados como canales de distribución – para empezar – y, obviamente, multiplicar la producción e instalaciones. Consecuentemente, se multiplica el empleo e inversiones, y la empresa, tanto la jurídica como el proyecto, se presenta prometedora. Estoy completamente convencida de que cuando la prueben, será todo, menos un fiasco.

B. Aquí hay mucha tarta…

Esta práctica, la de recomendar el consumo de productos nacionales, es muy conocida en las Economías Autárquicas y las de Estabilización; como lo fueron las que se vivieron en España después de la Guerra Civil.

Paella de marisco.

¿Recordáis la paella de los domingos, aquella que «recomendaba» Francisco Franco? Pues, si son muchas las desavenencias que se consideran con respecto a su figura -algunas completamente deplorables -, también es sabio subrayar aquellas otras proposiciones que ayudaron a impulsar la Economía Nacional.

Fábrica de arroz

El caso del arroz, «promocionar» su consumo «dominguero», ayudó a impulsar la producción de arroz, su distribución, crear algo de aparato industrial alrededor y, aumentar, consecuentemente, el empleo. En este sentido, y dentro del conocimiento popular, también ha viajado el descontento de las gentes. En Huelva existen grandes marismas que proveen gran parte de nuestro arroz nacional; la apreciación que he escuchado a muchos onubenses es la de: «nosotros lo producimos» y «la cigala» los vende. En fin, desconozco completamente como es la situación actual, pero que bien puede homogeneizarse la participación industrial de Andalucía con respecto a otras zonas geográficas españolas con las que presenta asimetrías en este sector secundario.

Judías verdes frescas.

¿Os habéis dado cuenta de la de oportunidades que tiene al alcance Andalucía? Viene a ser una de las huertas de Europa y, sin embargo, es muy pobre en industrias de procesados.

Aquí siempre he visto un filón para el crecimiento. Contando con ese coste mínimo que supone el transporte – otro filón para las estrategias de eficiencia en costes -, además de poder contar con acceso a productos de calidad intermedia que terminan perdidos; bien pueden ser, primera y segunda, merecedores de: tomates fritos, nuevos kétchups, nuevas salsas, nuevos licores, nuevos delicatessen,…y muchas de nuestra hortalizas, pueden ser merecedoras de congelados de: pistos, braseados… o simplemente troceados y menestras. ¿Y la conserva natural?

¡Madre mía!, a veces he revisado documentos y datos empresariales y he visto que nos comemos en Andalucía nuestros propios productos, aunque por empresas que nos lo compran en España, procesan y venden – o, lo que es más extraordinario, en el extranjero.

¡Anda que no hay para hacer para nuestro propio crecimiento y empleo!

Harina de otro costal sería pensar en crear una nueva línea de supermercados andaluces. Puede renacer desde la cooperación de otras cooperativas ya existentes, donde se unen para promocionar y crecer con los propios productos. ¿Podría esto mermar el crecimiento de otras empresas españolas ya consolidadas? Lo cierto es que sí y no. Depende de si cooperan o no. De cooperar, bien pueden sustituir ciertos bienes de consumo por otros, bien pueden participar como inversionistas… En fin, las fórmulas son muy diversas. Lo que no hay que perder de vista es el Norte, y el Norte es que Andalucía es la Comunidad Autónoma con mayor potencial de consumo, ¿habría que plantearse en Andalucía cuál es el grado de participación de su sector secundario en la industria de la alimentación?, ¿habrá frenos puestos a su crecimiento?

C. El Gobierno del fiasco…..

Ahora que es importante dar ideas y promover maneras con las que dar una nueva visión a las cosas – crear oportunidades -, en el campo de Andalucía yo no dejo de ver oportunidades. Pero es más, esperamos que tanto Andalucía como toda España sea, en un futuro muy próximo, renovada desde un nuevo Gobierno, que verdaderamente esté por crecer y progresar, por el orden, la claridad y, sobre todo, por nosotros, los ciudadanos españoles e inmigrantes legales.

Siguiendo esta premisa, no creo que sea necesario justificarme cuando

el pueblo desprecia y abuchea a los ministros y ministras y su presidente «all over the place«.

Lo más reciente, el azote a huevazos del colectivo de camioneros desesperados a la presencia de Yolanda Díaz, Mónica Oltra, Mónica García, Ada Colau y Fátima Hamed en Valencia.

Indignados, solicitan que si no toma medidas el Gobierno para un transporte digno, EL TRANSPORTE SE PARALIZA.

¿Qué supone la parálisis del sector de transporte, aunque solo sea la del colectivo de camioneros? Supone…

CERO ABASTECIMIENTO, por ende, CERO EN SUPERMERCADOS, y…CERO EN HOSTELERÍA, también CERO EN VENTAS AGROPECUARIAS, y así sucesivamente.

¡Un EFECTO DEVASTADOR!

Y sí, sin los camioneros no somos nadie, como aclaman.

Esto me ha hecho recordar la huelga que hubo en 2008, se paró el transporte y causo estragos – ¿recordáis que tumbo al sector lácteo? -. En mi entorno más cercano, el familiar, terminó por arruinar la plantación de sandías y, consecuentemente, mi padre, de la tremenda preocupación, terminó hemipléjico por infarto cerebral (tuvo siete ictus).

Con lo que, desde la experiencia personal, sé el alcance de las palabras que se han puesto en su boca muchos camioneros de España, completamente indignados. Porque, dados los precios de las energías, fundamentalmente , ¿quién quiere ir a trabajar si encima te arruinas?

No creo que le importe mucho a Chiqui Montero, Ministra de Hacienda, quien ha hecho Hacienda, recientemente, con las senadoras de «Igualdad». Esto es, sueldos anuales de 275.000 euros. Haciendo cuentas, una fracción del cómputo de este sueldo en catorce pagas nos devuelve unos 20.000 euros por mes, salvo dos meses que alcanzan, cada uno de ellos, casi los 40.000 euros. ¿A cuántas pensiones equivalen, ahora que las recortan? ¿Cuál es la consternación y empatía de la Ministra de Hacienda – la ama de llaves del cajón de los fondos de todos los españoles – para con los camioneros? ¿Su consternación y empatía es la de subir los impuestos para solventar el llevar la mano al cajón indebidamente? Porque lo que son escándalos, lleva otro en el zurrón de unos 80 millones de euros (García-Melero, 2021) ¿Habremos entre todos de pillarle los dedos en el cajón a Chiqui Montero o ya se los ha pillado sola?

Desde luego que la Vicepresidenta Segunda del Gobierno, a pesar de advertirnos las «fake news» que es inmejorable, va a ser posiblemente removida del cargo, he leído hace un rato (García-Melero, 2021).

¡Vaya con las «fake news» también!

Otro día habrá para profundizar en la situación económica española y la de su Gobierno. De esta manera, traer a la superficie todo aquello que pasa desapercibido ante nuestros ojos, tener un conocimiento esclarecido de lo que se acaece en nuestro entorno más cercano, más y más nos abra los ojos.

Por hoy, con solo echar un vistazo a este video podemos dar fe cómo silencian lo que verdaderamente ocurre en las calles de España y lo que verdaderamente ocurre en el Gobierno. Alterando, con ello, la percepción de nuestra realidad. Ahora, sin embargo, maestros del engaño, padres y madres de la mentira es lo que todos podemos ver con claridad.

Para iluminarnos, en la medida que leemos en prensa «oficial» que «La hoy vicepresidenta segunda ha labrado su prestigio y tirón electoral en el pactismo, la amabilidad y la buena imagen. Tanto, que ha logrado ser ya la política mejor valorada, según las principales encuestas» (Prieto, 2021) cuando en realidad la reciben a huevazos, indignadas todas aquellas personas que hacen el grueso del sector de transporte (Periodista Digital (Ed.), 2021), resulta bastante ESCLARECEDOR:

un actual Gobierno esperpéntico y unos medios de comunicación manipuladores y comprados (los «desinformativos«, los llamo yo).

B. Salgamos del caos y busquemos la luz…

Volvamos a la alimentación, con esto del poder de reparto de nuestros queridísimos camioneros. Si nos ponemos a pensar en ideas, también es bueno pensar en todos y, de haber asimetrías hoy día en la participación de la industria de la alimentación – tan exageradamente básica -; también es bueno considerarlas para procurar no acentuar la distancia, sino acercar a las gentes.

Otro ejemplo, si os detenéis a pensar en las «uvas de Nochevieja», el caso es análogo al del arroz; aunque, enfocado en sobreponer a la Economía en un caso de excedente de la producción. No es tan antigua la historia de nuestras uvas, data de la primera mitad del siglo XX. Con ánimo de ayudar al sector, se promocionó el consumo de las «12 uvas de la suerte». Y, la verdad, ayudó sorprendentemente. El eco ha llegado a nuestros días, transformando, incluso, el precio para esta fecha que las hizo dadoras de la «suerte».

¿Os imagináis la de sectores que se pueden sustentar, estabilizar y/o impulsar si tan solo promovemos el consumo de algunos de nuestros productos de manera nacional?

En realidad, viene a ser una manera de cooperación entretejida dentro del propio tejido empresarial español. Sustituyendo el consumo de productos foráneos por otros nacionales.

Esta simpleza de cooperación ayuda a mantener la riqueza de aquellos que participan y, la verdad, no creo que cueste mucho diseñar puntos de cooperación desde los que concentrar y redistribuir algunos de nuestros apreciados tesoros, para empezar. Creo que aquí podemos ver todos la necesidad de unión e identidad como pueblo y nación.

Algunos de nuestros tesoros los encuentro en la industria de los quesos, también en las cárnicas, y, ¡cómo no!, ¡el calzado y las pieles! ¿Sabíais que nuestro calzado y pieles son venerados en el extranjero? Los consideran de una calidad excepcional; hasta España es conocida como la «piel de Toro«.

¿Por qué no fomentar el consumo de nuestros quesos, embutidos, zapatos y botas?

Después de todo son de más calidad y, adicionalmente, españoles. Más empleo y crecimiento.

También, hablando de fiascos, que mejor hablar que de nuestros vinos. ¿Por qué no fomentar el consumo de nuestras rarezas? En España, una cultura que traspasa las fronteras es el Jerez; primo hermano del Brandy. Su historia, muy por encima, nace de la explotación de un cierto tipo de uvas por empresarios anglosajones; fundamentalmente británicos. Ellos dieron vida a este vino tan exquisito, lo promocionaron y han hecho una maravilla de él. Aquí es palpable lo transcendental que es saber poner nombre a las cosas y diseminar el nombre y sus virtudes.

¿Os imagináis que hacéis algo similar con el vino Málaga o el vino de naranja de Sevilla?

Una pena que éste último se pueda encontrar en escasos puntos de comercio, como lo es El Corte Inglés. Este vino de naranja, de hecho, siempre que ha venido alguien a hacerme una visita -entretanto vivía en Sevilla -, era un vino que, si no he comprado como regalo, lo he ofrecido como sugerencia para probar. Desde esa espléndida vista a la Catedral de Sevilla que encuentras en los veladores de los bares que recorren la calle arriba, se hace todo un deleite para quien se ofrece como todo un souvenir.

Hacer de las exquisiteces, suvenires, es otra tarea a explotar en España. Pero, ¿qué me decís del aceite de oliva? Somos los máximos productores de aceite de oliva y, sin embargo, contamos con un contingente que limita nuestras entregas comunitarias.

¿Qué tal si se crean empresas foráneas en Europa, con otros socios, con las que multiplicar nuestras posibilidades entretanto se mejora este contingente?

Es una empresa que, adicionalmente, hace crecer fuera. Claro que, indirectamente, comprende control español.

Bueno, estas ideas, son solo eso, ideas; aunque pueden terminar por motivar a alguien o servir como palmadita en el hombro.

Ideas para el desarrollo de empresas más complejas, requieren de cimentarlas sobre sus por qué y para qué. Espero transferir alguna que otra, entretanto promuevo mi pensamiento. Pero, eso, que importante se hace ahora promover ideas y maneras de hacer cosas, de una manera u otra, terminan por alumbrar a alguna persona o servir de motor para crear otras nuevas en la mente de otra persona.

Muy importante es subrayar ese término de «nacionalismo». ¿Se promueve el nacionalismo con la construcción y crecimiento de empresas españolas y la promoción de ideas para procurar frenar las asimetrías? No contemplo esto como un nacionalismo, contemplo ideas que, por igual, pueden ser puestas en funcionamiento en cualquier otro país. Luego, no es un nacionalismo, es una manera de hacer crecer a una nación: a lo largo y ancho, pensando en todos y también en el de afuera. Así, considero que lo fundamental es traspasar esos ideales políticos que enmarañan las cosas y ver esto como simples ideas para crecer y aprender a cooperar; valiéndose, por supuesto, del orgullo nacional, del entusiasmo por nuestras cosas, ¿acaso no es en cada país el fruto de las manos de sus gentes?

Que, es una pena que salgamos de viaje y nos enamoremos de la camiseta británica y, luego en España, asociemos llevar nuestros colores a ideales «fachas» de políticas pretéritas que solo están por crear división en las gentes. ¿Os habéis dado cuenta de los extranjeros, como lucen con orgullo camisetas de sus propios países cuando vienen a España?, ¿acaso de la única camiseta española que nos vamos a enorgullecer es de la «roja»?

A mi esto me ha parecido una estupidez siempre y, es más, me ha dado pena. Me da pena que se desgaste el amor por nuestras cosas, amparándose en ideologías políticas trasnochadas que remueven el pasado para hacerlas dadoras de intenciones agazapadas.

Para no irme muy lejos, estoy recordando ahora el rollo de la exhumación de Francisco Franco, los delitos de la Guerra Civil… ¡madre mía!, ¿y los delitos de ahora, no son nuestro presente?, ¿tiene sentido remover linderos de antaño para acentuar la separación de las personas con ideologías desmejoradas desde la pretensión? En fin, que no soy ni de derechas ni de izquierdas, ni del centro ese que llaman centro; porque la verdad, en España, siempre veo el mismo perro, aunque con distinto collar.

Claro que, hoy día, podemos apreciar todos un partido naciente, VOX, que vela por los intereses de la ciudadanía, denuncia los abusos del Gobierno, se anticipa con materia legislativa acertada, propone una nueva Agenda para el crecimiento de nuestro país, se desliga del globalismo, le pone freno y alternativa, etc..

VOX nos tiene a todos boquiabiertos.

No es de extrañar que sea VOX proclamado abiertamente en la calle como una salvación para España, lo que lo lleva a crecer y crecer desorbitadamente.

¡Abascal, presidente!

Es más, jamás me he afiliado a partido alguno; mas, viendo la actual situación que nos acosa y oprime, he decidido afiliarme. Algo que me causa mucha felicidad, comparte muchos principios conmigo.

Pero también comparto admiración por la nueva política emergente en el Partido Popular, diseñada y organizada desde la Comunidad Autónoma de Madrid por la Señora Isabel Natividad Díaz Ayuso; todo un nuevo referente político en Europa y «abroad«. Una política que trae un aire renovado a los madrileños, españoles y, por ende, a su partido político. No es de extrañar que sea aclamada presidenta para España.

¡Ayuso, presidenta!

Por cierto, es sabio saber apreciar y valorar las propuestas plurales, la diversidad de pensamiento, la diversidad política… Para empezar, en la pluralidad es donde empieza la tolerancia y, por igual, el eterno debate que, además de alejarnos de los nacionalismos, mientras esté por crecer, nos trae la mejora continua, nos trae la «Economía del Aprendizaje». Nunca hay nada perfecto y completo, la mejora es infinita. Es matemático, lo que tiende a subir sostenidamente es crecimiento. Ahí encontramos el infinito.

Mis felicitaciones, hoy día, a Abascal y Ayuso, estoy segura de que muy pronto serán nuestros presidentes.

Subrayando el carácter personal que entraña y atesora este blog, si se preguntan por mi ideología política, como se irá pudiendo ver, apunta en el keynesianismo – toques de Schumpeter, también -, aunque hacia una Economía Solidaria y Humana. Apunta, consecuentemente, en el biocentrismo y en la Economía y Sociedad del Aprendizaje; sin olvidar poner a las personas como centro de los intereses sociales y económicos – salvando siempre el ecosistema y biodiversidad-. En fin, una Economía del Aprendizaje con sus matices singulares. Así que, no tiene nada que ver con nada de lo que veo, porque todo lo que veo me parece bastante mejorable. Claro que sí veo que las políticas que congratulo más arriba se alinean con mi pensamiento y son vehículo para una verdadera Economía del Aprendizaje. Yo apuesto por ellas.

Otro día repasaré porqué me parece bastante mejorable el ente político de España. Por el momento, con promocionar ideas que podrían valer, me parece que estoy aportando un granito de «arroz».

Por cierto, si se preguntara alguien si mi intención es la de militar partido político alguno; no tengo el más mínimo interés. Aunque sí lo tengo, y mucho, en promover mi pensamiento y que alcance el corazón de las gentes y de los verdaderos líderes de hoy y de mañana, los que aclama su pueblo. Me siento infinitamente feliz acercando ideas, revisando cosas que no me parecen apropiadas y, por supuesto, escribiendo….

¡me encanta….un escribir!

Con cariño, a todas aquellas personas que me leen.

Un beso… ligar es ser ágil.

por Verónica García-Melero

García-Melero, V. (2021) CON-CIENCIA. negocioonline.net Recuperado el 15 de Noviembre de 2021 de: CON-CIENCIA | (negocioonline.net)

Periodista Digital (Ed.) (14 Noviembre, 2021) La vicepresidenta Yolanda Díaz, recibida a huevazos por los camioneros: «¡Fuera comunistas!». Recuperado el 15 de Noviembre de 2021 de: https://youtu.be/ryui5n2QYk8

Prieto, Alberto D. (14 Noviembre, 2021) Podemos recela de Yolanda Díaz tras los últimos fracasos y admite «roces» con Belarra y Montero. El Español. Recuperado el 15 de Noviembre de 2021 de: Podemos recela de Yolanda Díaz tras los últimos fracasos y admite «roces» con Belarra y Montero (msn.com)

Hoy somos….¡MUCHO CHI!

Mono no aware.

Expresión en Budismo Zen

La imagen de la portada nos trae, no solo la frugalidad del ciclo de floración del cerezo: Sakura, flor nacional de Japón; sino la apreciación de la transitoriedad de la vida y el acercamiento a la naturaleza, por igual.

Si nos preguntamos por la duración del ciclo de su floración, podremos apreciar esta frugalidad del tiempo; pues, Sakura marca el inicio de la primavera y, sin embargo, es tan breve su existencia – unas dos semanas-que cae en el cenit de su belleza, cuando aún no ha dado tiempo de llegar a marchitarse. Cerrando, consecuentemente, su ciclo.

En esta flor convergen el pensamiento sintoísta y budista, bases de la filosofía del país nipón. Si bien el sintoísmo venera la naturaleza, ubicando la misma – junto a los eventos que le acaecen – en el centro; bien es conocido que el budismo otorga gran importancia a la transitoriedad de la vida. Así, la belleza de esta última etapa de su floración, cuando la flor se desprende, ocupa la etapa más hermosa para el Budismo Zen. La etapa conocida como «Mono no aware», que significa: tener empatía o sensibilidad hacia todas las cosas y su temporalidad.

Podemos apreciar cómo de calada es esta filosofía en el pueblo nipón, justo para este momento de Sakura, sus gentes celebran multitudinariamente el Hanami. Una festividad en la que los japoneses, en masa, acuden a parques y jardines para comer y beber contemplando su belleza y, por igual, reflexionando bajo la sombra de sus cerezos (Supercurioso (Ed.), 2014).

Celebración del Hanami, Japón.

El cerezo nos trae el florecer, la primavera; aunque también nos trae el renacer, nos trae un ciclo de energía, un ciclo de Qi (Chi). De esta manera, habiendo considerado en Hoy somos…¡SUPERNOVAS! una primera perspectiva metafísica de nuestra luz, de nuestra «energía», y desde un prisma religioso; la transcendencia de la filosofía Budista Zen nos conecta con esta primera observación metafísica y logra ir, en vez de «más allá» (lo que viene a ser el significado de meta), «más adentro», esto es, a nuestro cuerpo físico.

Para que se comprenda con lucidez a qué se pretende dar respuesta con esta conexión de Qi (Chí) y la biología de nuestro organismo, acerquemos aquella primera pregunta que nos hicimos en La Reflexión de la Luz:

Si no, si concibiera esta luz como aquella que manifiesta mi conciencia, mi «luz existencial», ¿podría decir que biológicamente soy luz y es la luz de mi conciencia la que condiciona el bienestar de mi desarrollo?, ¿está la luz relacionada con mi esencia, con la esencia de mi ser?

A) ¿QUÉ ES EL Qi?

Siguiendo esta línea, necesario se hace, en este momento, comprender qué es Qi. Un buen entendimiento del concepto de Qi nos lo proporciona el Profesor Manuel Rodríguez Cuadras en su libro «Medicina Tradicional China: Teoría Básica I».

Sinograma del Chino Tradicional para Qi (Chí).

De acuerdo al taoísmo y a la filosofía y medicina chinas, el Qi, cuyo significado es«flujo vital de energía», es un principio activo que forma parte de todo ser vivo. Literalmente, es un término que significa «aire, aliento, disposición del ánimo« y ha terminado extendiéndose a otros países de Extremo Oriente, como lo son Corea, Japón y otros países, quienes han adoptado su trasncripción como Chí.

Luego, si se preguntaba por la razón de denominarlo así, Chí, aquí podemos comprender su causa. Con todo, contrastarlo con otros conceptos occidentales, puede conducirnos a apreciar similitudes de una manera, tal vez, más natural. Así, los conceptos: energeia, magnetismo animal, élan vital o energía vital (vitalismo) – todos de Occidente – son similares al Qi. En este sentido, también es muy similar el concepto de prana hindú, claro que con unos matices claramente diferenciados.

Entretanto el prana hindú es la energía que desde el aire respirable se adquiere en la respiración, el Qi es ésta misma energía proveniente del macrocosmos, aunque en el microcosmos (el cuerpo humano y la psique); lo que para la tradición India tal energía sería un factor místico.

Alcanzados esta definición primera y contraste con aquellos conceptos relacionados con el Qi, importante se hace también considerar el significado que este término encierra en estas otras culturas. De esta manera, el (Qi en Japonés) se traduce como energía, presencia, voluntad, salud o respiración; y en el yoga hindú, la palabra sánscrita prana viene a significar energía, respiración y sabiduría.

Como podemos apreciar el concepto de respiración, así como la energía, son un denominador común. ¿Por qué es esto? De acuerdo a Rodríguez (2010), editado por García-Melero (2017), los métodos de atención a la respiración, así como algunas técnicas, ocupan un lugar preeminente en los sistemas espirituales y terapeúticos orientales. Esto es debido a que la respiración es la herramienta principal para el conocimiento del Qi. De esta manera, este concepto de «flujo vital de energía» viene a menudo de la mano de doctrinas espirituales como el taoísmo y el budismo, y de prácticas espirituales como el yoga y el Taichí.

Siguiendo esta línea, los practicantes de doctrinas como el Kung-Fu Shaolín, Taijíquán, el Daito-ryu aiki-jutsu, el Aikido y otras artes marciales, afirman el control y uso que puede alcanzar el humano de la energía: acrecentándola y distribuyéndola por todo el cuerpo o usarla de forma concetrada; todo, gracias a la práctica de diversas técnicas.

Alcanzado este punto, concebimos la Chí como «la energía cósmica que circula de un modo polarizadamente recíproco (yin/yang) en el cuerpo de todo ser viviente y que la armoniosa y continua circulación de tal energía mantiene a la salud del cuerpo y de la psique» (Rodríguez, 2010 en García-Melero (Ed.), 2017, p. 63). Así, la energía Chí discurre por todo un circuito energético corporal a través de los kin – meridianos o canales -, los cuales están naturalemente ordenados, teniendo nodos o puntos clave, denominados xue, que se evidencian principalmente en la dermis. De esta manera, siendo la Chí una energía que fluye continuamente por la Naturaleza, la interrupción de su libre flujo en el cuerpo es la base de cualquier dolencia física o psícológica. Esto es, una alteración de nuestro circuito energético corporal provoca una enfermedad, varias o un síndrome.

Como podemos apreciar, este flujo de energía del macrocosmos, no solo es que nos conecte con nuestro microcosmos a través de la energía que conseguimos a través de la respiración; es, también, que nuestra energía, fruto de nuestra respiración, ha de estar en equilibrio y armonía con la energía de la naturaleza. Aquí estriba el eje central de la filosofía sintoísta, la naturaleza y todos aquellos acontecimientos que le devienen. Un sustrato que sirve de base para el actual «biocentrismo» que trataremos en otra ocasión.

En lo que ahora respecta, alcanzado el conocimiento de este «flujo vital de energía«, Qi o Chí, podemos dar paso a contestar estas primeras preguntas que nos hacemos para afirmar que somos luz.

B) ¿Qué relación hay entre el Qi o la Chí y la luz?

Dalmau-Santamaria (2013), produjo un trabajo, publicado por la Revista Internacional Acupuntura, de gran calado en lo que es ahora un tema de actualidad y de creciente interés: «Biofotones: una interpretación moderna del concepto tradicional “Qi”» . En este trabajo, con ánimo de acercar una interpretación moderna del concepto de la Chí, se describen las bases científicas sobre las que descansa el mismo. Por igual, analiza hallazgos científicos actuales según los cuales se permite relacionar los biofotones y el tejido conectivo, y dicha relación con el sistema de meridianos del circuito energético corporal descrito por la MCT.

«Este hecho podría indicar que los meridianos descritos por la medicina china son como cables de fibra óptica que llevan gran cantidad de bioinformación en forma de biofotones y con la función, entre otras, de contribuir a la regulación y la organización de los sistemas biológicos«. (Dalmau-Santamaría, 2013, p. 57).

Si se pregunta por el biofotón, (del griego βιο, que significa « vida » y φωτο, « luz ») es un fotón de origen biológico que no es el resultado de los productos de una reacción enzimática específica. Luego, se trata de una quimioluminiscencia de origen biológico que se distingue de la bioluminiscencia por la ausencia de mecanismo enzimático relacionado, y por una magnitud o intensidad ultra-débil (del inglés, ultra-weak spontaneous photon emission, o a veces, de forma más simple, ultra-weak photon emission) (Wikipedia, 2020, Biofotón).

Para abstraer esta diferencia entre quimioluminiscencia y bioluminiscencia se hace imperante acercar el conocimiento primero al respecto sobre la transmisión de información desde los sistemas biológicos a partir de biofotones. Esta evidencia fue desarrollada por el físico Fritz-Albert Popp, alguien que encontrará nombrar cada vez más en los medios de comunicación.

De acuerdo a Fritz-Albert Popp, citado por Dalmau-Santamaría (2013), en la transmisión de información desde los sistemas biológicos a partir de biofotones, dichas radiaciones ultradébiles están relacionadas especialmente con la molécula de ADN y tienen un papel importante en la regulación de los procesos bioquímicos y la mitosis, la comunicación celular y los campos morfogenéticos, y la memoria.

En adición, el Dr. F.A. Popp junto con el Dr. Klaus Peter Schlebusch, médico de Essen (Alemania), «demostraron por primera vez la presencia de radiaciones infrarrojas pertenecientes al rango de biofotones de longitud de onda ancha en estructuras del cuerpo humano que parecían ser idénticos al sistema de meridianos descritos por la medicina china« (Dalmau-Santamaría, 2013, p. 56).

Con todo, nos podemos aventurar a ir más allá al conectar la base teórica del trabajo de Dalmau-Santamaría (2013), con el presupuesto básico de conocimiento de Medicina China Tradicional recogido por Rodríguez (2010), editado por García-Melero (2017). así, con ánimo de acercar una interpretación moderna del concepti de Qi, el Dr. Dalmau-Santamaría nos acerca una serie de hallazgos que permiten establecer bases científicas para tal interpretación.

En este sentido, profundiza en la conexión física que procuran diversas teorías y conocimientos para la interpretación del Qi, como lo son: (a) la consistencia que proporciona la física de partículas, (b) la conexión de ésta con la física cuántica, (c) el concepto de campo introducido por Faraday, (d) el Campo Punto Cero, Vacío Cuántico o Mar de Dirac; (e) el Campo creado o campo de Higgs; (f) y hasta la «Partícula de Dios», por ser sintéticos.

C) BIOFOTONES en nuestro cerebro: ¿está nuestra conciencia relacionada con la luz?

Como ha sido expuesto con anterioridad, el Profesor Rodríguez (2010) nos acerca el conocimiento referente al circuito energético corporal, a través del cual discurre la Chí por los kin – meridianos o canales -, los cuales están naturalmente ordenados, teniendo nodos o puntos clave, denominados xue, que se evidencian principalmente en la dermis.

Si, en adición, consideramos aquellas experiencias que nos acercan expertos marciales con respecto al control mental del Qi (Rodriguez, 2010); el hallazgo de Fritz-Albert Popp con relación a la transmisión de información desde los sistemas biológicos a partir de biofotones; y el conocimiento demostrado por el Dr. F.A. Popp junto con el Dr. Klaus Peter Schlebusch con respecto a la similitud que, con el sistema de meridianos del circuito energético corporal según la MCT, presentan las radiaciones infrarrojas pertenencientes al rango de biofotones de longitud de onda ancha en estructuras del cuerpo humano (Dalmau-Santamaría, 2013, p. 56); fácil es cuestionarse si nuestra conciencia es luz.

Emisión de Biofotones por el Sistema Fascial

¿Está nuestra conciencia directamente vinculada a la luz en tanto se demuestra que el flujo de Chí (radiaciones infrarrojas pertenecientes al rango de biofotones de longitud de onda ancha en estructuras del cuerpo humano) está presente en nuestro cerebro, atiende a un circuito energético corporal, transmite información a los sistemas biológicos, está relacionado especialmente con la molécula de ADN y tienen un papel importante en la regulación de los procesos bioquímicos, la mitosis, los campos morfogenéticos, y la memoria?

Emisión de Biofotones por el Sistema Fascial

Es más, podemos ir más allá, ¿está nuestra conciencia directamente vinculada a la luz en tanto se demuestra que el flujo de Chí, además de estar presente en nuestro cerebro, atiende a un circuito energético corporal, transmite información a los sistemas biológicos, está relacionado especialmente con la molécula de ADN, tiene un papel importante en la regulación de los procesos bioquímicos, la mitosis, los campos morfogenéticos, la memoria, puede acrecentarse, distribuirse o concentrarse con técnicas de focalización y meditación y viene de la mano de prácticas espirituales milenarias como el yoga y el Tachí, así como de doctrinas espirituales, igual de milenarias, que tienen como objeto «ELEVAR LA CONCIENCIA»?

Yo, definitivamente, creo que ¡SÍ!

Con todo, si alcanzar el conocimiento de que nuestra conciencia es luz, nos resulta aún descabellado; Pérez (2017) nos acerca un artículo que viene a contener una información asimilada a la descrita y sostiene que «si se produce una comunicación óptica, los Biofotones que producen nuestros cerebros podrían verse afectados por el entrelazamiento cuántico, lo que significa que puede haber un fuerte vínculo entre estos fotones, nuestra conciencia y posiblemente a lo que muchas culturas y religiones se refieren como Espíritu».

Adicionalmente, la Dra. María Pérez (2017) nos acerca, tanto experimentos, evidencias empíricas, como sus propias reflexiones. De entre ellas, resultan fascinantes las siguientes (extraído de su artículo: ¡Los científicos descubren biofotones en el cerebro que podrían insinuar que nuestra conciencia está directamente vinculada a la luz!)

En un par de experimentos, los científicos descubrieron que los cerebros de ratas pueden pasar solo un biofotón por neurona por minuto, pero los cerebros humanos podrían transmitir más de mil millones de biofotones por segundo.

Esto plantea la pregunta, ¿podría ser posible que cuanta más luz se pueda producir y comunicarse entre las neuronas, más conscientes sean?

Si hay alguna correlación entre los biofotones, la luz y la conciencia, puede tener fuertes implicaciones de que hay más en la luz de lo que somos conscientes.

[…] Muchos textos y religiones se remontan al pasado, desde los albores de la civilización humana han informado de santos, seres ascendidos e individuos iluminados que tienen círculos brillantes alrededor de sus cabezas.

Desde la antigua Grecia y la antigua Roma, hasta las enseñanzas del hinduismo, el budismo, el islamismo y el cristianismo, entre muchas otras religiones, los individuos sagrados fueron representados con un círculo brillante en forma de un resplandor circular alrededor de sus cabezas.

Si fueran tan iluminados como se describen, tal vez este círculo brillante fue solo el resultado de la conciencia superior con la que operaron, por lo tanto, una mayor frecuencia y producción de biofotones. Tal vez estos individuos produjeron un nivel más alto de biofotones con una mayor intensidad debido a su iluminación, si existe alguna correlación entre los biofotones y la conciencia.

Pero una de las implicaciones más emocionantes, el descubrimiento de que nuestros cerebros pueden producir luz, es que tal vez nuestra conciencia y nuestro espíritu no están contenidos dentro de nuestros cuerpos. Esta implicación es completamente pasada por alto por los científicos.

El entrelazamiento cuántico dice que 2 fotones entrelazados reaccionan si uno de los fotones se ve afectado, sin importar dónde se encuentre el otro fotón en El Universo sin demora.

Tal vez exista un mundo dentro de la luz, y no importa dónde se encuentre en El Universo, los fotones pueden actuar como portales que permiten la comunicación entre estos dos mundos. Tal vez nuestro espíritu y conciencia se comuniquen con nuestros cuerpos a través de estos biofotones. Y mientras más luz producimos, más despertamos y encarnamos la totalidad de nuestra conciencia.

En este sentido, como hemos expuesto al principio, el flujo vital de energía, Qi o Chí, es la energía que desde el aire respirable se adquiere en la respiración (macrocosmos), aunque para revertirla en el microcosmos (el cuerpo humano y la psique); muy importante se hace subrayar la psique y, por supuesto, que no hablamos de aire, hablamos de un flujo vital de energía (radiaciones infrarrojas pertenecientes al rango de biofotones de longitud de onda ancha en estructuras del cuerpo humano, como demuestra la ciencia) que nos conecta con la naturaleza y el Universo.

Volviendo a Pérez (2017): Esto puede explicar el fenómeno de por qué el estado de un fotón se ve afectado simplemente por su observación consciente, como se ha demostrado en muchos experimentos cuánticos. Tal vez nuestra observación comunique algo a través de nuestros biofotones con el fotón que se está observando, de manera similar al enredo cuántico, ya que la luz es solo una sustancia unificada que se dispersa en todo el Universo y se afecta a través de cada partícula de luz.

Por supuesto, nada de esto está ni siquiera cerca de ser una teoría. Pero hacer preguntas y tomar semejantes hipótesis metafísicas podría acercarnos más a la verdad y comprender qué es la conciencia, de dónde proviene y cuáles son los misterios que se esconden dentro de la luz.

D) PROPOSICIÓN DE DOS HIPÓTESIS A LA COMUNIDAD CIENTÍFICA DESDE LA EXPERIENCIA PERSONAL Y EL CONOCIMIENTO QUE SE COMPARTE EN ESTE ARTÍCULO.

Siguiendo la línea que propone la Dra. María Pérez, quién nos invita a plantearnos hipótesis metafísicas que nos acerquen más a la verdad y comprender qué es la conciencia, de dónde proviene y cuáles son los misterios que se esconden dentro de la luz; con ánimo de conectar la observación de fenómenos físicos con aquellas observaciones de artistas marciales que hacen con respecto al control mental del flujo de energía corporal, se proponen dos hipótesis para la Comunidad Científica.

La primera de ellas descansa sobre esta observación que vengo a apreciar y, dado mi conocimiento en la física natural y cuántica -solo soy una aficionada – desconozco si el planteamiento que propongo es totalmente correcto.

H1: «La adquisición de destrezas en el control del Qi posibilita bien la expansión y distribución de energía bien su concentración, lo que vendría a ser ese comportamiento de la partícula en el campo de Higgs».

La segunda de ellas, sin embargo, se nutre de esta primera observación. Más allá de estar acertada o no en la primera proposición, la intención de ésta otra es algo más transcendental para el estudio y, por igual, se nutre del trabajo expuesto en este artículo. De esta manera:

H2: Apreciar el comportamiento de leyes y propiedades físicas en nuestro propio organismo puede proporcionarnos un campo de investigación holístico en el que microcosmos (humano) y macrocosmos (universo) nos proporcionan un entendimiento más consistente y veraz de aquellos fenómenos físicos y metafísicos que comprende nuestra realidad y que, a su vez, se interconectan; aflorando, por igual, en una comprensión más profunda de nuestra conciencia.

Por el momento, me ha resultado muy estimulante unir aquellos conocimientos que, con respecto a nuestra luz existencial y vital,

había ido recapitulando; hoy he logrado darle forma, movida por los ejercicios de yoga de mi hijo, los cuales me han inspirado para este artículo.

Con amor y mucho Chí, a mi hijo.

por Verónica García-Melero

Dalmau-Santamaría, I. (2013). Biofotones: una interpretación moderna del concepto tradicional “Qi”. Revista Internacional de Acupuntura. 2013 7 (2.) 59 – 64

García-Melero, V. (Ed.) (2017). El Libro de Sheng Laoshi. Guía Básica de Filosofía China: Principales Escuelas de Pensamiento y Artes Marciales. Limburg an der Lahn, Germany: PediaPress GmbH.

Pérez, M. (2017). ¡Los científicos descubren biodotones en el cerebro que podrían insinuar que nuestra conciencia está directamente vinculada a la luz! Recuperado el 30 de Marzo de 2020 de: http://draperezbenitezsoc.wixsite.com/home/single-post/2019/07/15/%C2%A1Los-cient%C3%ADficos-descubren-biofotones-en-el-cerebro-que-podr%C3%ADan-insinuar-que-nuestra-conciencia-est%C3%A1-directamente-vinculada-a-la-luz

Rodríguez, M. (2010). Medicina China Tradicional: Teoría Básica I. Fundación Europea de Medicina Tradicional China.

Supercurioso (Ed.) (2014). Sakura, la flor del cerezo y su simbología. SuperCurioso. Recuperado el 30 de marzo de 2020 de: https://supercurioso.com/sakura-la-flor-del-cerezo-y-su-simbologia/

Wikipedia (2020) Biofotón. Recuperado el 30 de marzo de 2020 de: https://es.wikipedia.org/wiki/Biofot%C3%B3n

Hoy somos….¡LUZ!

No todo lo que es oro brilla; remedio chino e infalible.

Me gustas tú; …próxima estación…esperanza; Manu Chao.

A. INTRODUCCIÓN.

¿Has caído alguna vez en la cuenta de la capacidad de una bombilla para iluminar cualquier habitación de una casa? De estar completamente a oscuras y tropezando con todo, pasas a identificar con perfecta claridad cada elemento que se encuentra en su interior, una vez has encendido la luz.

Esa luz de esa habitación es asimilada a esa claridad que encontramos en nuestra mente y nos ayuda a discernir soluciones, dilucidar respuestas o el entramado de cualquier asunto; es la luz de nuestro esclarecimiento interior. Desde luego que, constantemente, podemos apreciar que se nos ha iluminado el pensamiento, que hemos alcanzado el entendimiento de las cosas.

Esta luz, si nos observamos, es una luz que alcanzamos cuando reflexionamos, cuando estamos serenos, cuando hayamos paz. Probablemente, de ser la solución a un problema, rápidamente el entusiasmo recorra nuestro cuerpo y nos encienda de felicidad.

Esta viene a ser la experiencia de nuestra iluminación intelectual, de ponerte un ejemplo, y seguro es algo cotidiano o, al menos, habitual en tu vida. En este sentido es como podemos entender qué es la iluminación.

Para empezar, en su acepción más habitual significa «adquisición de entendimiento«. Con todo, podemos abstraer su significado como concepto filosófico y religioso; pues, después de todo, apuntan en la misma dirección.

Son dos palabras alemanas las que denotan y distinguen a la iluminación intelectual y espiritual. Así, la «iluminación intelectual» entendida como el esclarecimiento interior, poner en claro o llegar al fondo de un asunto, se denomina Aufklärung. (Wikipedia, 2021A).

Por su parte, el término Erleuchtung es aquel que denota a la «iluminación espiritual«, siendo ésta la experiencia de lo divino, reconocida en su manifestación. Una manifestación que comprende la experiencia del sentido de unión con Dios o con el Universo (depende de la fe, doctrina o filosofía) y, por igual, la experiencia de un sentimiento de paz, amor y felicidad excelsos (Wikipedia, 2021A).

Desde luego que en este sentido, el de la «Iluminación espiritual«, la vía para alcanzarla se presenta muy plural. Con todo, ya sea la perspectiva de las religiones abrahámicas, ya sea una filosofía o religión oriental – por ejemplo – todas convergen en la persona virtuosa y en un camino (manera de ser, de hacer las cosas, de vivir y relacionarse con los demás) movido por el amor, la bondad, la verdad, la humildad, el sentido de la justicia y orden -por ser breve -. Si bien, aquella iluminación espiritual que contempla la vía religiosa, la que es conectada a una religión, profesa por igual el desarrollo de la fe, la esperanza y la caridad como virtudes.

Esta fe, esperanza y caridad son definidas como virtudes teologales por Santo Tomás de Aquino y son equiparables a las que promueve la filosofía taoísta y todas aquellas doctrinas y religiones que nacen o tienen raíz en estas enseñanzas. Así, de considerar la obra madre de todas ellas, el Tao-Te-King de Lao-Tsé, por fe entenderíamos la confianza en el Tao; por esperanza, la no intervención en el flujo de las cosas y espera en la resolución armónica que proviene del Tao; y, en la caridad, el dar y otorgar en abundancia, no solo a aquel que por igual te da y otorga, sino a aquel que no lo merece, por igual (Golden (Tr.) Lao Tsé, 2014).

De considerar la intención de este artículo, procurar un entendimiento profundo de la «iluminación intelectual» y de la «iluminación espiritual», nos conduce a un estudio que traspase esas primeras nociones que ofrece wikipedia y que suelen ser desdeñadas como aportaciones entretanto no se subrayan con un consistente argumento. Así, necesario se presenta bucear en la primera definición y procurar un conocimiento más esclarecedor con respecto a aquellos medios para alcanzarla y objetos para su consecución y logro, y que dan sentido a su esencia y existencia.

En este sentido podemos cuestionarnos: ¿existe un vínculo entre la iluminación espiritual y la motivación de la conducta humana?, ¿convergen en dicho vínculo, de haberlo, alguna filosofía o doctrina ancestral y algún propósito que sirva de vector para construir alguna teoría de la motivación humana?, ¿este propósito que sirve de vector para construir una teoría de la motivación humana nos ayuda a dilucidar el bien último que persigue el hombre en su realización y logro de su plenitud?, ¿qué características presenta el ser humano que ha alcanzado tal grado de realización?, ¿ha sido este logro de realización y plenitud estudiado a lo largo de nuestra historia y conectado, a su vez, con la iluminación espiritual?, ¿dónde convergen la iluminación intelectual y la espiritual?

Ahora bien, atendiendo a una amplitud de miras y para con la sociedad, este tema se presenta fascinante y, a su vez, motor para encaminarnos en aquello que – de manera elemental – la RAE define como Noosfera, esto es: «conjunto de los seres inteligentes con el medio en que viven» (Wikipedia, 2021B).

De dilatarnos en el concepto podriamos considerar desde su primera definición por Vladímir Vernadski como conjunto de seres vivos dotados de inteligencia, hasta la teoría de la noosfera recogida más tarde por el teólogo cristiano Pierre Teilhard de Chardin.

En concreto, para este teólogo, dicha noosfera atiende al proceso de evolución de la conciencia universal, así es que lo considera un intervalo, una fase, que es consecuencia de la inmediatamente anterior. Pues, su teoría, originariamente, se articula en tres fases: geosfera, biosfera y noosfera; siendo cada fase el efecto de la inmediatamente anterior.

Así, siendo la biosfera (o evolución biológica) la fase que precede a la noosfera y la geosfera (o evolución geológica) la fase que marca un principio en esta sucesión encadenada de efectos y antecedente de la evolución biológica, Teilhard nos hace profundizar en una conciencia más madura y colectiva que traspasa la Noosfera en una cuarta fase. Pues, de profundizar en la evolución de la conciencia, conducida por la humanidad, alcanzaría su teoría su cénit en una última etapa de la evolución: en la cristosfera. Entiéndase que la noosfera es el estado que conduce la energía liberada en el acto del pensamiento. Está a la altura de las cabezas humanas interconectando toda la energía del pensamiento y generando la conciencia. Lo cierto es que es vetusto y variado lo que hay escrito en este sentido (Wikipedia, 2021B).

Con todo, y abstrayendo la importancia de traer a colación el concepto de Noosfera, así como la Teoría de Teilhard, cabe preguntarnos: ¿la educación del individuo encaminada en la consecución de su realización y plenitud nos devolvería una sociedad orientada en la paz y la tolerancia?, ¿serían la paz y la tolerancia vehículos para la evolución de la conciencia del hombre? En este sentido es bueno recordar que los vectores direccionales de la Educación Mundial, desde el Informe Delors, no son otro sino el de hacer de las personas, personas tolerantes, respetuosas entre ellas y para con el medio en que viven (ver, Delors et al., 1996). ¿Será importante recuperar en nuestra educación y sistema social, económico y político la importancia del campo de la metafísica y su papel en la consecución del propósito de vida y realización y plenitud del ser? ¿Nos conduciría la evolución de nuestras conciencias a una cuarta fase evolutiva definida por Teilhard como cristosfera?

De lo que no cabe duda es que orientar nuestros esfuerzos educativos en el desarrollo de la tolerancia y, por ende, en nuestra inteligencia emocional, no solo se circunscribe al marco de acción educativa mundial que viene proponiéndose e impulsándose desde hace casi tres décadas, sino que, por igual, se alinea tanto con aquellas averiguaciones que ha venido dilucidando la ciencia y pensadores como con nuestro propio sentido común. ¿Acaso no es feliz cuando respeta y aprecia que le respetan?, ¿acaso no siente paz cuando se siente integrado socialmente? Como verá, es fácil de digerir esto, créame: somos conciencia, somos luz, y más felices estamos cuando brillamos. ¿Residirá nuestra luz en la energía que proviene del amor? En este sentido, la hija de Albert Einstein recientemente nos ha revelado en un vídeo la importancia, según su padre, del amor como fuente de energía de todo ser vivo que fundamenta y explica, al unísono, la Teoría General de la Relatividad.

B. LA ILUMINACIÓN ESPIRITUAL Y LA AUTORREALIZACIÓN SEGÚN KURT GOLDSTEIN.

Siguiendo la línea de interrogantes propuesta, la cual nos permitirá profundizar en el conocimiento de aquello que denominamos «iluminación intelectual» e «iluminación espiritual», nos aventuramos a contestar esa primera pregunta: «¿existe un vínculo entre la iluminación espiritual y la motivación de la conducta humana?»

En este sentido, al indagar aquellas necesidades que mueven al individuo en su autosatisfacción alcanzamos una coherente conexión de las mismas con la propia «iluminación espiritual». De acuerdo a Modell (1993) y VV.AA. (2008), Kurt Goldsein nos introdujo originariamente el concepto de autorrealización para hacer alusión a la «realización del potencial humano». En este sentido, hablamos de la expresión de la propia creatividad, la búsqueda de la iluminación espiritual, la búsqueda del conocimiento y el deseo de darle a la sociedad. Todos estos no son sino ejemplos de autorrealización. Es más, de acuerdo a este teórico organísmico «la tendencia a realizarse a sí mismo tanto como sea posible es el impulso básico…el impulso de autorrealización es la motivación verdadera» (Modell, 1993, p. 44).

Como podemos apreciar, la tendencia a realizarnos a nosotros mismos es un impulso básico, es aquella verdadera motivación que logra la realización de todo nuestro potencial como seres humanos. En una primera aproximación, podemos apreciar que este potencial presenta diversas metas, como por ejemplo: la expresión de nuestra creatividad u originalidad, el deseo de dar a la sociedad y la propia iluminación espiritual, vista como la experiencia de un sentimiento de felicidad, gozo y paz excelsos y alcanzados desde aquel camino espiritual que, por antonomasia, es virtuoso, como ahora veremos. Con todo, son otros estudios al respecto los que amplifican y procuran un mejor entendimiento de la autorrealización y, por igual, los revisaremos.

C. CONVERGENCIA DEL TAOÍSMO Y DEL PENSAMIENTO DE KURT GOLDSTEIN EN EL DESARROLLO DEL POTENCIAL DEL SER COMO ILUMINACIÓN ESPIRITUAL O AUTORREALIZACIÓN.

Acabamos de establecer un vínculo entre la iluminación espiritual y la autorrealización, este no es otro sino la «realización del potencial humano». De esta manera, y siguiendo nuestro esquema interrogatorio, cabría cuestionarnos: «¿convergen en la realización del potencial humano alguna filosofía o doctrina ancestral y algún propósito que sirva de vector para construir alguna teoría de la motivación humana?»

En primer lugar, resulta conveniente subrayar que esta «realización del potencial humano» estudiada por Goldstein es precursora de la teoría de Abraham Maslow. De abordar su trabajo, entendemos que la autorrealización es el climax de dicho potencial, es el punto álgido de la satisfacción de las necesidades de las personas; algo que puede apreciarse desde la experiencia sensible junto a aquellos rasgos de personalidad y patrones de conducta que manifiesta la persona autorrealizada (ver Modell, 1993; VV.AA. 2008). Con todo, procuraremos un estudio y comprensión de su Teoría más adelante.

Siguiendo la intención de esta cuestión, si hemos podido dilucidar que esa «realización del potencial humano» es el vector que direcciona la «Teoría de la Motivación Humana» de Abraham Maslow; ahora cabría apreciar cómo la filosofía taoísta converge en dicha motivación verdadera para alcanzar el desarrollo del ser, para alcanzar dicho potencial; lo que denomina «Te».

En este sentido, y por ser breve, la simple recuperación de la apertura del libro de «El Te», dentro de la obra «Tao-Te-King» de Lao-Tse, nos proporciona un esclarecedor entendimiento del mismo. De esta manera, esta introducción nos dice así:

«La versión primitiva de la palabra «Te» muestra un cruce de caminos con un ojo en su centro, al igual que «Tao», pero con el dibujo de un corazón añadido. Su sentido exacto es «virtud», «poder» o «potencia«».(Golden (Tr.) Lao Tsé, 2014, p.51)

Aquí cabría señalar que la propia introducción nos advierte que por el concepto de «virtud» ha de entenderse el sentido original del latín, esto es, «la calidad inherente o innata de una cosa», no en el sentido de la moral. (Golden (Tr.) Lao Tsé, 2014, p.51).

Por igual continua diciendo: «Expresa la medida de la fuerza innata de una persona. Al valor simbólico del ojo que discierne el camino se añade el del corazón, que en la cultura china es la sede de la mente y la inteligencia, de la voluntad y el coraje, además de las emociones y pasiones». De esta manera, «El conocimiento del «Tao» otorga el «Te», el poder de hacer las cosas» (Golden (Tr.) Lao Tsé, 2014, p. 51).

De acuerdo a esta exposición y al conocimiento y experiencia personal con esta filosofía y con las artes marciales que se erigen sobre dicho pensamiento, Kung-Fu de Monjes Shaolín, podría discernir que tanto la regulación de nuestra conducta, como el autocontrol y dominio de nuestro cuerpo – que parecen fruto de nuestro raciocinio, de nuestra mente – son en realidad la consecuencia y el fruto que se consigue en la perseverancia y en la persistencia, en nuestra fuerza, en nuestra resiliencia; siendo todas ellas consecuencia de la autodisciplina que nace en nuestra voluntad. «La verdadera disciplina no es impuesta, nace de nosotros mismos», Proverbio Oriental.

Así es que el error y la persistencia y perseverancia que acompañan al coraje y a la voluntad por superarte en el entrenamiento personal – por ejemplo – son los que nacen en la emoción, en el corazón y, consecuentemente, son los que permiten el desarrollo de nuestra potencia. Aquí es donde nace la verdadera focalización o atención plena, cuando logramos un entusiasmo tal, fruto de nuestra emoción, que logramos fluir como el agua. «Be water, my friend», diría Bruce Lee, amante de la filosofía taoísta como nos revela su propio «Jet Kune Do Tao», focalizado en la voluntad y en la economicidad de la física del movimiento.

De una manera análoga sucede con el acceso al conocimiento. En este sentido, no es hasta que descubres dentro de ti mismo aquello que en apariencia te trasmite el conocimiento sobre cualquier asunto, materia o tópico, hasta que no alcanzas el entendimiento de que la sabiduría es la que logra alcanzar la sagacidad con que discernir cualquier asunto, tópico o problema. Esta potencia o poder de hacer las cosas que es definido «Te» y encuentra imagen en la sabiduría es la consecuencia del camino, «Tao»; esto es, es haber alcanzado la capacidad de discernir el «camino correcto» y «tomarlo».

Así es que se «toma el Te en el camino», esto es: se alcanza el corazón (entendimiento y unión con el Tao) en el cruce (ojo – discernimiento) del camino (manera de ser, hacer las cosas, aquello que nace y es fruto de tu amor y voluntad) y gracias a tu esfuerzo y dedicación movidos por el espíritu (mano que sale del camino). Así, «la verdadera fuerza reside en el espíritu» (Bruce Lee).

Luego, muchas son las caídas y los errores que nos conducen a nuestro «Te» dentro de un camino virtuoso. No es de extrañar una máxima que empuja en el coraje, la valentía, la resiliencia y la imperturbabilidad en pro del descubrimiento de tu sabiduría y propio perfeccionamiento o potencia: «Si te caes siete veces, ¡levántate ocho!» (Proverbio chino). Aquí, «ocho» hace alusión al óctuple sendero, a haber caminado todo el camino, esto es: la iluminación espiritual e intelectual que, como vemos, nace y es fruto de una manera de ser y vivir humilde, desapegada y focalizada en la bondad, la misericordia , el coraje, la resiliencia y la autodisciplina – por ser breve -.

En resumen, no solo esta primera definición de Goldstein sobre «la autorrealización» es precursora de las investigaciones y teoría de Abraham Maslow sobre la motivación humana, sino que es la esencia del objeto hacia el que conduce el Tao o Dao (camino) que lega el conocimiento filosófico taoísta de Lao-Tsé, esto es: el Te como desarrollo de la potencia del ser (Golden (Tr.) Lao Tsé, 2014, p.51).

C. LA AUTORREALIZACIÓN COMO BIEN ÚLTIMO Y LOGRO DEL SER HUMANO SEGÚN LA TEORÍA DE LA MOTIVACIÓN HUMANA DE ABRAHAM MASLOW.

Por igual, indagar en la verdadera esencia y existencia de esta «iluminación espiritual» nos conduce a que, fruto de aquellas capacidades y habilidades que se van desarrollando y puliendo desde y en nuestra conducta y nos conducen a ser personas honestas, bondadosas, misericordiosas, leales, verdaderas, justas, fuertes, resilientes, entre otras, – muy orientadas en la inteligencia emocional – es donde entendemos la «autorrealización» del ser visto desde el conocimiento que nos lega la «Teoría de la motivación humana» de Abraham Maslow.

En este sentido, profundizar en esta teoría tan extendida en el campo de las Ciencias Empresariales y Económicas (la conocí en segundo curso de mi titulación, gracias a nuestra profesora, Mercedes, de la Universidad de Sevilla) nos conducirá a conocer aquellas fases motivacionales que se concatenan en la evolución del ser y están supeditadas a la consecución de logros y satisfacción de necesidades; siendo su meta última la autorrealización. Algo que, desde milenios atrás, nos define la visión aristotélica en su «Magna Moralia» tanto de la felicidad, como del bien supremo del hombre que logra tal felicidad (Rodríguez (Tr.), Aristóteles, 2020).

De esta manera, profundizar en el conocimiento que nos transmite Abraham Maslow y, por igual, el conocimiento filosófico accidental que nos lega Aristóteles – contraponiéndolo con Pitágoras, Sócrates y Platón-, nos devuelve una basta conexión entre esas necesidades o bienes en el hombre que conforman su vector de movimiento en la consecución de su felicidad, de su autorrealización.

Siguiendo esta línea, para comprender cómo es que nos dirigimos a la autorrealización como logro último y clímax de nuestra existencia y sentido de la vida, se hace necesario abstraer el conocimiento que nos lega Abraham Maslow en su Teoría. Posiblemente, un breve repaso a la misma nos haga entender con claridad qué es eso de la «Motivación Humana» y cómo es que está vinculada a la autorrealización como clímax.

En este sentido, y considerando el papel de la Ciencia de Empresa y Economía, una breve definición de la economía en sí nos puede servir de referencia para abstraer la importancia de esta Teoría en este campo. Siguiendo esta linea podríamos decir que la economía es aquella ciencia encargada de asignar y repartir recursos disponibles y escasos para satisfacer las necesidades humanas.

Solo considerando el vínculo con la satisfacción de las necesidades es como se nos presentó esta Teoría en clase, concretamente fue considerando la reflexión sobre nuestras propias necesidades y nuestra satisfacción. Así, nuestra profesora, Mercedes, nos expuso la conocida Pirámide de Maslow y nos hizo reflexionar sobre cuál creíamos que eran aquellas que nos orientaban en nuestra motivación para la conquista y logro. Rápidamente mi mente se fue a la creatividad, la espontaneidad, la falta de prejuicios, la resolución de hechos…en fin, no son sino la autorrealización, pero es que apuntaba desde pequeña en estas cosas. Incluso desdeñaba el éxito o el reconocimiento social que la precede, total, leí autorreconocimiento, así que con reconocerme a mí misma, guardármelo para mí, y saber que soy un tiro al aire…yo quería autorrealización.

Después de todo, a pesar de esa inocencia que conlleva ignorar la Teoría al completo y esos 19 añillos, no iba mal encaminada, como he podido descubrir a lo largo de los años. Es esto el sentido de la vida, aquello que todos buscamos y que, afortunadamente, descansa en la moralidad, en la falta de perjuicios, en la creatividad y la originalidad, en el cuestionamiento de las cosas, en la mente resolutiva, en ir más allá de los moldes o modas del momento, de los convencionalismos sociales; después de todo, no es que sea aquello que verdaderamente me llama la atención y me motiva, sino aquello que logra definir más bien mi manera de ser. Con todo, si esto es algo que puede apreciarse en rasgos de la personalidad, ¿cómo conseguirlo definitivamente si es una necesidad?

Desde luego que el camino espiritual hace mucho para ayudarte a transcender ese «éxito» que encorseta la sociedad en lujos artificiales y apariencias que no terminan de hacer felices a las personas. Parece ser que falta algo, y ese algo es desapegarte del ego que acompaña a este «reconocimiento social» y moverte más en subrayar tus verdaderos valores personales, aquellos que te hacen único y hacen fuerte tu personalidad.

Estaríamos hablando de reforzarte en el sentido de la honestidad, de la verdad, de tu singularidad, de tu sentido de la justicia y de orden, entre otros. De esta manera, es fácil abstraer que si las personas se amoldan a convencionalismos, a apariencias o a una doble moral que los impide ser ellos mismos, difícil se les presenta la autorrealización; puesto que impide el gozo de aquella verdadera felicidad que descansa en ser honestos y verdaderos consigo mismos, por ser breves.

Con todo, es importante considerar que esta pirámide no son sino eslabones que concatenan nuestras necesidades. Unas necesidades que se presentan graduadas desde las más básicas o fisiológicas, las de seguridad, las de afiliación, las de reconocimiento, hasta alcanzar las de autorrealización. En este sentido Maslow nos advierte que no necesariamente para ascender en esta graduación han habido de ser completamente satisfechas todas, aunque sí en cierto grado.

De concentrarnos en la autorrealización, que es el tema que nos ocupa, cuando vemos que contamos con nuestras necesidades fisiológicas cubiertas, especialmente la salud, por igual contamos con aquellos medios que nos garantizan seguridad, gozas de relaciones de afecto o, más aún, has comprendido que el amor es desinteresado y es algo que te mueve en todas tus relaciones; has alcanzado tu propio autorreconocimiento desde tu humildad y es algo que te hace feliz, además de contar con la confianza, el respeto de aquellas personas que te conocen y cierto grado de éxito personal y de acuerdo a tu manera de ver el éxito (es tan variable como la percepción personal de la felicidad) probablemente estés en esa fase donde te refuerzas en tus valores, moralidad y, probablemente, traspasas los convencionalismos, siendo independiente de la cultura dominante, reconociendo que tienes falta de prejuicios con estas cosas y que eres espontáneo e, incluso, desinteresado y desprendido. Es probable que te centres en los problemas y los enfrentes en virtud de tus soluciones y fruto de tu propia visión personal. En este sentido, estamos hablando de una persona autorrealizada.

Pero, ¿qué más acompaña a esta persona autorrealizada?, es más, ¿qué es aquello que verdaderamente nos hace apreciar tal autorrealización, tal iluminación espiritual? Pues no es otra cosa que el sentirse feliz, gozoso y lleno de paz y tranquilidad. Una experiencia asimilada a la que se manifiesta en la iluminación espiritual, como hemos visto. Y si nos preguntamos, ¿cómo reconoce Maslow este sentimiento de satisfacción plena y felicidad? De acuerdo a Maslow, reconocemos ese sentimiento feliz en: la verdad, la bondad, la belleza, la unidad, la integridad y transcendencia de opuestos, la vitalidad, la singularidad, la perfección, la realización, la justicia y orden, la simplicidad, la riqueza ambiental, la fortaleza, el sentido lúdico, la autosuficiencia y búsqueda de lo significativo.

En este sentido, fácil es ver que si con tus conductas y manera de ser te alejas de la bondad, de la integridad personal, de la moralidad, de la unidad, de la honestidad, de la justicia, de la verdad…mucho camino te falta por recorrer para alcanzar a ser una persona satisfecha y, consecuentemente, feliz.

D. UN AVANCE PARA SEGUIR REFLEXIONANDO.

Otro día profundizaremos en la experiencia de la felicidad en la autorrealización, considerando las aportaciones y nexos de unión entre la Teoría de Motivación de Abraham Maslow y el Pensamiento Aristotélico precursor de la Summa Theologiae de Santo Tomás de Aquino.

Desde este objetivo primero lograremos conectar el conocimiento que nos otorga una mirada atenta al mismo y, así, poder dar respuesta a aquellas cuestiones primeras sobre la profundidad en que ha sido este logro de realización y plenitud estudiado a lo largo de nuestra historia y conectado, a su vez, con la iluminación espiritual. Por igual, nos permitirá analizar dónde convergen la iluminación intelectual y la espiritual. Es muy probable que incluso coja tintes sociológicos o económicos ya estudiados a lo largo de nuestra historia y nos devuelva nuevas preguntas y respuestas que nos encaminen en nuestra «Noosfera».

Finalmente, aún siendo mi personalidad y conductas alineadas con esta autorrealización que define Maslow desde su Teoría de la Motivación, y siendo mi manera de hacer las cosas tan orientada en la virtud propia del Taoísmo (lo descubrí a los ocho años cuando me incorporé a clases de Kung-Fu por un monje Shaolín); puedo decir con un profundo amor y certeza, desde lo más hondo de mi corazón, que ha sido gracias a mi hijo que me siento autorrealizada plenamente. Como suelo decirme, por más estudios y cosas que sepa hacer, no hay nada en esta vida que me satisfaga más plenamente que ser la mamá de mi hijo, de mi muñequito lindo, de mi Juan.

Con amor infinito, a mi niño, mamá. Una mamá que te saca de la ola y es tu «súperheroa».

Cardona, F. (Tr.) John Stuart Mill (2011) On Liberty ( Sobre la paz) Edición especial para el MUNDO. Madrid: Ciro Ediciones, S.A.

Golden, S. (Tr.) Círculo de Lectores (Ed.) Lao-Tsé (2014) El Libro del Tao. Barcelona: Círculo de Lectores S.A.

Martínes, T. Y Rodríguez, L. (Tr.) Aristóteles (2020) Poética y la Magna Moralia. La Biblioteca Clásica Gredos. Barcelona: RBA Libros S.A.

Modell (1993) The Private Self, Cambridge, Massachusetts : Harvard University Press.

Muñoz, J. (Tr.) Inmanuel Kant (2005) Zum ewigen Fiedem. Ein philosophischer Entwurf. ( Hacia la paz perpetua. Un esbozo filosófico) Edición especial para el MUNDO. Madrid: Ciro Ediciones, S.A.

VV. AA. (2008) Filosofía y ciudadanía I. Madrid: Santillana, 2008.

Links de consulta:

https://www.e-torredebabel.com/Historia-de-la-filosofia/Filosofiamedievalymoderna/SantoTomas/VirtudesMorales.htm

http://www.theologia.va/content/cultura/es/organico/cardinale-presidente/texts/lux.html

https://es.wikipedia.org/wiki/Tom%C3%A1s_de_Aquino

https://es.wikipedia.org/wiki/Metaf%C3%ADsica_(Arist%C3%B3teles)

https://es.wikipedia.org/wiki/Ontolog%C3%ADa

https://es.wikipedia.org/wiki/Metaf%C3%ADsica

https://es.wikipedia.org/wiki/Trascendencia

https://es.wikipedia.org/wiki/Inmanencia

https://es.wikipedia.org/wiki/Inmanencia

Noosfera – Wikipedia, la enciclopedia libre

Autorrealización – Wikipedia, la enciclopedia libre

Iluminación (creencia) – Wikipedia, la enciclopedia libre

Hoy somos…¡SUPERNOVAS!

Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder.

Mateo 5:14, Reina-Valera (RVR 1960)

¿Tendría sentido encender una lámpara para iluminar una habitación y, sin embargo, esconderla debajo de la mesa? Entonces, si encendemos un foco para iluminarnos o darnos calor, ¿no es lógico que saquemos el provecho de aquello para lo que ha sido dispuesto? De esta misma manera somos todos, todos somos luz. ¿Tendría sentido negar este conocimiento?, ¿tendría sentido apagar nuestra luz, adormecernos y sucumbir al miedo? O, por el contrario, siendo la luz todo un espectro electromagnético, ¿tendría más sentido encendernos y ponernos a brillar?, ¡brillar a todo full!

La luz la vamos a apreciar hoy desde muy diversos «prismas» y, la verdad, depende del prisma, así es su descomposición y esa onda senoidal que, no solo dibuja su espectro multicolor, sino su matemática, por igual.

¿Recordais el album «Dark side of the moon» de Pink Floyd? Esta portada trae a luz uno de los hallazgos de Sir Isaac Newton: apreciar la luz como la composición de corpúsculos y, desde este primer entendimiento, descomponerla en colores espectrales. Lo cierto es que Newton desconocía que la luz era una onda y, más lejos aún estaba de conocer, que era electromagnética. Éstos son hallazgos de una física más reciente que nos refutan, hoy día, que la luz es energía, es magnética y es perfecta. Con todo, nace de la oscuridad. Sin oscuridad no habría luz.

Aún así, figúrense si ha evolucionado el conocimiento humano con respecto a la luz: ya desde 1801 podemos decir que no todas las luces son perceptibles por el ojo humano. Esta luz no perceptible de la que hablo es la radiación ultravioleta, descubierta en ese año por Joham Wilhelm Ritter. Una luz que, al igual que otra luz, necesita de oscuridad para una mejor apreciación.

Con todo, volviendo a la intención de esta entrada, se pretende dejar en la mente del lector que, para empezar, «nuestra propia mente» es luz. Por igual, vamos a dar un pequeño repaso a la organización y comunicación celular: éstas, también, son luz. Comprenderemos, entonces, que nuestra conciencia es luz, nuestro espíritu es luz y nuestra inteligencia emocional: ¿será luz o será la fuente de nuestra luz? ¿Mayor será nuestro bienestar y paz interiores, mayor será nuestra luz?, ¿mayor es nuestra luz, mayor será nuestra salud?

En este sentido último, otro día procuraremos caminar los senderos del bienestar que conducen a esa luz. Para hoy, que mejor comienzo que empezar a caminar sobre el entendimiento de aquellas primeras preguntas de esta Reflexión de la luz:

¿Podría abstraer el conocimiento de que como polvo de estrellas que soy, provengo de la luz, soy luz y hacia la luz es donde voy? o, ¿podría aventurarme a ir más allá y afirmar que soy luz, biológicamente, y, atendiendo al carácter intrínseco de esta naturaleza inherente que le es propia, necesito de luz del Sol para procesarla en mi interior y crecer, como lo hace una planta?, ¿podría aventurarme a decir que soy «fotosintética» y no haberme excedido en ello? Si no, si concibiera esta luz como aquella que manifiesta mi conciencia, mi «luz existencial», ¿podría decir que biológicamente soy luz y es la luz de mi conciencia la que condiciona el bienestar de mi desarrollo?, ¿está la luz relacionada con mi esencia, con la esencia de mi ser?

A) SOY POLVO DE ESTRELLAS, PROVENGO DE LA LUZ Y HACIA LA LUZ ES DONDE VOY.

Como diría Carl Sagan, «somos polvo de estrella que piensa acerca de las estrellas». No es una frase romática, un ardid poético, es una frase de un prominente divulgador científico del siglo XX con mucho conocimiento de causa. Hoy día, consideremos como la ciencia nos acerca que: «nuestros átomos y los de todo lo que existe están hechos de los desechos de estrellas antiguas que murieron en el pasado remoto del universo» (Toca, A. y Marcos, L., 2019)

En este sentido, consultar el artículo producido Toca y Marcos (2019) para Muy Interesante: «¿Cuál es el origen de la frase «somos polvo de estrellas»? puede resultar muy esclarecedor para esta primera cuestión. Con todo, ¿qué mejor que dejar posteada una imagen que ha viajado conmigo desde que la encontré y desde la que podemos apreciar aquellos elementos que destacan en nuestro organismo y que dan sentido a esta luz de la que hablamos?

Siguiendo este transito de la luz, soy luz, vengo de la luz y a la luz voy, vamos a recordar desde un plano metafísico unas palabras de Jesús de Nazareth tanto en el Evangelio de Juan como en el de Tomás, considerado, este último, apócrifo:

Juan 8: 12-20

Jesús dirigió la palabra a los fariseos, diciendo:
“Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la Vida”.
Los fariseos le dijeron: “Tú das testimonio de ti mismo: tu testimonio no vale”. Jesús les respondió:
“Aunque Yo doy testimonio de mí, mi testimonio vale porque sé de dónde vine y a dónde voy; pero ustedes no saben de dónde vengo ni a dónde voy.
Ustedes juzgan según la carne; Yo no juzgo a nadie, y si lo hago, mi juicio vale porque no soy Yo solo el que juzga, sino Yo y el Padre que me envió.
En la Ley de ustedes está escrito que el testimonio de dos personas es válido.
Yo doy testimonio de mí mismo, y también el Padre que me envió da testimonio de mí”.
Ellos le preguntaron: “¿Dónde está tu Padre?”
Jesús respondió:
“Ustedes no me conocen ni a mí ni a mi Padre; si me conocieran a mí, conocerían también a mi Padre”.

Él pronunció estas palabras en la sala del Tesoro, cuando enseñaba en el Templo. Y nadie lo detuvo, porque aún no había llegado su hora.

Estas palabras invitan a reflexionar acerca del Dios juedocristiano YHVH. Si verdaderamente conocieran al Padre, ¿habrían entedido que en el Padre solo hay amor y luz?. ¿habrían entendido que al ser hechos a su imagen y semejanza esta luz y este amor son perfectos como su creación?, ¿habrían entendido que Dios vive en toda su creación?

Podemos apreciar esta afirmación de Jesús en el Evangelio de Juan, de considerar lo que recapitula el Evangelio de Tomás.

Evangelio de Tomás:

Logion 77: “Jesús dijo: ‘Yo soy la luz que está sobre todas las cosas que estoy todo. De mí todo salió, y me consiguieron todos. Dividir un trozo de madera, allí estoy yo. Levanta la piedra y me encontrarás allí.’”

Como podemos apreciar, siendo el Padre en Jesús, es así que él dice que, por igual, es la luz que está en todas las cosas, puesto que todas las cosas son hechas de esa «luz» de su creación.

Logion 114: «Simón Pedro les dijo: ‘Haz que María nos deje, para las mujeres no merecen la vida.’ Jesús dijo: ‘Mira, yo guiaré para hacerla varón, para que también ella puede llegar a ser un espíritu viviente semejante a vosotros varones. Por cada mujer que se haga hombre entrará en el reino de los cielos.’”

En este sentido, muy importante es eliminar ese sesgo cultural que divide al hombre y la mujer de por aquellos años. Todo un pensamiento transgresor para su momento y para hoy día. ¿Qué es esto? Esto es que Dios nos creó macho y hembra, nos creó con los mismos elementos, con la misma luz. Sesgar la participación en el Reino de Dios por causas sobrevenidas a leyes que desplazan a la mujer a roles pasivos en cuanto a su participación en asuntos sociales y políticos, no es el sesgo de Dios para entrar a su Reino. Sin embargo, bien claro deja que ésta ha de hacerse como el varón, ser un igual, no un diferente.

No se trata de vida de celibato, ¿acaso se necesita el celibato para entrar en el Reino de los Cielos? Lo que se necesita es ser una persona virtuosa: justa, bondadosa, misericordiosa, fuerte y, consecuentemente, con la belleza del alma que le es inherente.

No obstante, podemos profundizar más aún en aquello que la palabra «varón» encierra en una expresión metafórica más profunda de acuerdo a las interpretaciones rabínicas judías de la época de Jesús. En este sentido, por el término «varón» estamos considerando la capacidad dadora que comporta la naturaleza del hombre y que, como bien señala Jesús, por igual lo es en la mujer.

Es más, de tomar el rasero de la capacidad de procrear, ¿es la mujer, además de receptora, transformadora y, por igual, dadora entretanto recibe semen y, fecundado en su óvulo, lo trasforma en su interior hasta crear y dar a la luz un hijo? Parece ser que su efecto dador es más bien expansivo o exponencial. No es de extrañar que nuestra historia más ocultada y, recientemente revelada, nos devuelva una sociedad, eminentemente, matriarcal. ¿Habría algún interés en promover el arrinconamiento de la mujer desde las doctrinas religiosas y políticas que distan unos cinco mil años atrás?

Luego, considerada la expresión metafórica del concepto de varón en las escrituras y textos judíos, de ser el sacerdocio y la ensañanza propios del varón, es apreciable que en esta predisposición hacia la búsqueda y conocimiento del Padre que promueve Jesús está la capacitación en la mujer para tal logro; puesto que, por igual, cuenta con las mismas habilidades que un hombre. Lástima que esto haya sido considerado apócrifo, ¿por qué será? Tal vez profundizar en más escrituras apócrifas de diferentes religiones y en comparación con aquello que nos devuelve la historia velada más reciente, nos hagan ver con mayor nitidez las razones por las que ciertos condicionamientos sociales y políticos están, ¿habrá llegado el tiempo de un cambio más profundo en nuestra sociedad?

Otra pregunta sería ¿qué es el Reino de los Cielos? El Reino de los Cielos es explicado reiteradas veces a lo largo de los diferentes Evangelios canónicos y, por igual, los apócrifos.

En este sentido, de tomar el Evangelio de Tomás, nos recordará a otros Evangelios como el de Mateo.

Evangelio de Tomás, logion 20: “Los discípulos le dijeron a Jesús: ‘Díganos qué reino de los cielos es semejante.’ Él les dijo: ‘Es como un grano de mostaza, la más pequeña de todas las semillas, pero cuando cae en tierra preparada, que produce una planta grande y se convierte en un refugio para las aves del cielo.’”

Evangelio de Mateo:

Mateo 13: 31-32:

Les contó otra parábola: «El reino de los cielos es como un grano de mostaza que un hombre sembró en su campo. 32 Aunque es la más pequeña de todas las semillas, cuando crece es la más grande de las hortalizas y se convierte en árbol, de modo que vienen las aves y anidan en sus ramas».

También, nos acerca otra parábola Mateo 13 en su versículo 33:

33 Les contó otra parábola más: «El reino de los cielos es como la levadura que una mujer tomó y mezcló en una gran cantidad de harina, hasta que fermentó toda la masa».

Tanto el grano de mostaza, como el grano de levadura, consiguen la más grande de las creaciones, de las evoluciones. En el primer caso, un árbol vigoroso, alto y fuerte, con un ramaje tal, que muchas aves vienen a hacer sus nidos. En el caso de la levadura, con muy poquito se fermenta, se crece la masa y se multiplica en capacidad.

Así es nuestra glándula pineal, el asiento del alma, para Descartes; el Palacio Niwan, para los taoístas; el Ojo Celestial, de los antiguos chinos; el sexto chakra o Ajna (tercer ojo) de la tradición védica; la ventana de Brahma, del hinduismo, etc. Luego, el conocimiento que nos transmite Jesús del Reino de los Cielos, del Reino de Dios, no es otra cosa que alcanzar el conocimiento profundo de nuestro ser, descubrir nuestra verdadera naturaleza, aceptarnos, evolucionar en este camino y despertar nuestra consciencia.

En este sentido, si todos despertamos nuestra consciencia, todos hemos abrazado ese camino virtuoso de bondad, justicia, valor y belleza del alma, ¿no sería la Tierra un Paraíso? ¡Por supuesto que sí!, ¿y cómo se logra avanzar por ese camino al despertar, cómo se logra traer el Reino de Dios a la Tierra? Solo se logra si avanzamos en nuestro camino siendo fieles a dos principios fundamentales, necesarios y suficientes: con amor a Abba (Padre-Madre) – si no, llamémoslo Universo para aquellos que no creen en la existencia de aquello que se concibe con el concepto de Dio-s – y con amor al prójimo como a uno mismo.

¿Habremos de querernos y aceptarnos para querer y aceptar a los demás?, ¿será el camino del amor al prójimo el camino de la paz, de la tolerancia y de la empatía?. ¿será el camino de la paz y del amor el camino al Reino de Dios, a su perfección celestial?, ¿habremos sido hechos del polvo a imagen de Dios, de su perfección, luz y amor, para ser eso: como su imagen?, ¿si nos alejamos del amor y luz en el que nos hizo, nos alejaremos del Reino de los Cielos?, ¿será importante ser hermanos, ser una gran hermandad para compartir y vivir juntos nuestra necesidad espiritual?, ¿solo de pan vive el hombre?, ¿no necesitará de alimento espiritual?, ¿será mayor el alimento espiritual si es compartido y multiplicado por todos?, ¿será fundamental tener lugares físicos en los que reuninos y compartir nuestras necesidades espirituales? Yo, personalmente, creo que es fundamental. El hecho de que Jesús nos diga que está en cualquier cosa o que el templo está dentro de nosotros mismos, no quita que deje de existir esa necesidad física de Iglesia (entendamos el concepto físico como el lugar que pueda albergar una reunión de personas -bien un campo, bien un edificio -) de la que por igual Él nos habla y, a la vez, ordena que sea instituida y organizada. El problema surge cuando se dogmatizan las palabras con la pretensión de crear divisiones: «La división de las cosas, separa a los hombres, no a las cosas», como diría Bruce Lee, en su Jet Kune Do Tao.

¿Qué podemos abstraer de estas observaciones metafísicas? Simplemente, que toda religión está por lo mismo, por el amor de Dios. Y, si Dios es amor, ¿por qué hay tanta división?, ¿acaso el propósito de Dios es dividirnos? Que yo sepa, el propósito de Dios es que seamos una gran hermandad, que seamos hermanos.

Importante sería ahora considerar la Torre de Babel, igual que nos esparció por la tierra la división de lenguas, así hace cada una de las religiones en la Tierra: dividirnos.

¿Será importante conocer cuál es la única verdad?, ¡claro que sí!, ¡si la única verdad es que somos hechos a imagen y semejanza de Dios o del Universo, como lo quieran llamar! Somos perfectos si nos organizamos como el Universo, ¿y cómo es el Universo perfecto? El Universo es perfecto en vibración, luz, energia y magnetismo; luego, somos perfectos si vibramos en la escala en la que hemos de vibrar, emanando la luz que hemos de emanar, liberando y generando la energía que corresponde a este ciclo y siendo magnéticos, que es la consecuencia de todo.

Y, ¿cómo se consigue todo esto? Se consigue con el amor, porque el amor es lo que nos hace tener luz, vibrar, tener energia a raudales y magnetismo.

Ahora, es momento de continuar con la intención de esta primera entrada, buscando aquellas averiguaciones de la Ciencia de nuestros días que vienen a refutar cada una de las cosas que nos cuestionamos. Otras, aunque en un plano metafísico, son el nuevo paradigma hacia el que apunta la Ciencia Moderna.

B) SOY LUZ, BIOLÓGICAMENTE y C) NUESTRA CONCIENCIA ES LUZ son dos epígrafes que se publican en una siguiente entrada como continuación a esta primera parte. Una vez publicadas ambas, se procederá a recapitularlas en una sola.

por Verónica García-Melero

Índice

Capes, D. (2020). Explora Dios. ¿Qué es el Evangelio de Tomás? Recuperado de: https://www.exploregod.com/es/articulos/que-es-el-evangelio-de-tomas

Reina-Valera (Ed.) (1960). Juan 8:12-20. Recuperado el 29 de Marzo de 2020 de: https://www.biblegateway.com/passage/?search=Juan+8%3A+12-20&version=RVR1960

Reina-Valera (Ed.) (1960). Mateo 5:31-33. Recuperado el 29 de Marzo de 2020 de. https://www.biblegateway.com/passage/?search=Mateo+5%3A14&version=RVR1960

Toca, A. y Marcos, L. (25 de Noviembre, 2019). ¿Cuál es el origen de la frase «somos polvo de estrellas»?. Muy Interesante. Recuperado el 29 de Marzo de 2020 de. https://www.muyinteresante.es/ciencia/video/cual-es-el-origen-de-la-frase-somos-polvo-de-estrellas-351574432609

Wikipedia (2020). Luz. Recuperado el 29 de Marzo de 2020 de: https://es.wikipedia.org/wiki/Luz

Sanaj

El sabio conoce siempre la mejor manera de ayudar a las personas y no abandona a nadie; conoce la mejor manera de ayudar a las cosas y no las abandona. Esto es alcanzar la clarividencia.

Fragmento Epigrama XXVII, Libro «El Tao», Tao-Te-King, Lao-Tsé.

Capítulo 0. La Reflexión de la Luz: hoc lumen est.

Capítulo 1. Hoy somos…. ¡SUPERNOVAS!

Capítulo 2. Hoy somos….¡MUCHO CHI!

Capitulo 3. Hoy somos….¡CRÍTICOS!

La Reflexión de la Luz: hoc lumen est.

Todo lleva el Yin sobre los hombros y el Yang en los brazos; ambos se funden en la energía vital para crear la armonía.

Fragmento del Epigrama XLII, Tao Te King, Lao-Tsé

¿Podría abstraer el conocimiento de que como polvo de estrellas que soy, provengo de la luz, soy luz y hacia la luz es donde voy? ¿O podría aventurarme a ir más allá y afirmar que soy luz, biológicamente, y, atendiendo al carácter intrínseco de esta naturaleza inherente que le es propia, necesito de luz del Sol para procesarla en mi interior y crecer, como lo hace una planta? ¿Podría aventurarme a decir que soy «fotosintética» y no haberme excedido en ello? Si no, si concibiera esta luz como aquella que manifiesta mi conciencia, mi «luz existencial», ¿podría decir que biológicamente soy luz y es la luz de mi conciencia la que condiciona el bienestar de mi desarrollo? ¿Está la luz relacionada con mi esencia, con la esencia de mi ser?

En este sentido, ¿soy luz?, ¿necesito de la luz solar para ayudar a crecer a la luz de mi conciencia?, ¿necesito de la luz solar para crecer, como la hace mi bambú?, ¿hacia arriba, ahondando sus raíces, siempre buscando el Sol?

Es más, antes de seguir por este derrotero de cuestionamientos reiterados, ¿no debería reiterarme a cuestiones en otra dirección?, ¿se habrán cuestionado nuestros ancestros, desde su remota existencia, la importancia y aquello que nos une al Sol?, ¿por qué ha sido el Sol venerado, como un dios?, ¿por qué el Sol se presenta como un símbolo sobre el que edificar un sincretismo que aúna las creencias de muy diversas civilizaciones?

Y si decidiera seguir otro derrotero, ¿por qué es tan importante el Sol?, ¿por qué es tan importante su luz para los procesos químicos y hormonales de nuestro organismo?, ¿por qué la luz del Sol condiciona nuestro estado mental y físico?, ¿por qué es posible que en períodos de mayor luz, como la primavera y el verano, estemos más enérgicos y vivos?, ¿más alegres?, ¿con más ganas de socializar, reunirnos, salir, bajar a la playa, tomar el sol, organizar barbacoas, moragas, comidas ocasionales fuera, pasear…?, ¿se debe a que hace mejor tiempo, hace más calor, hay una mayor radiación por nuestra proximidad a él que termina elevando la temperatura y es esto lo que nos condiciona a alterar nuestros hábitos: que hace más sol?

Y si considero que es más sabio considerar el Sol desde la dimensión física, entonces, ¿sería importante alcanzar el conocimiento de la física de la luz? En este sentido, ya que por física atiendo al conocimiento de la física natural, la observada como causa-efecto en la naturaleza, ¿tendría sentido retrotraerme al conocimiento epistemológico del concepto de la luz, diferenciar qué es luz de lo que no lo es?, ¿se presenta la luz como algo dual?, ¿atiende la luz a una dimensión polar que la define, esto es, ésta existe de haber tinieblas, de haber un concepto totalmente opuesto:la oscuridad? Es más, ¿el conocimiento que, sobre su polaridad, se tiene, ha sido reflexionado primero desde un alcance metafísico?, ¿habrá sido la metafísica de la luz y la conciencia la que nos ha permito dar a luz el entendimiento de lo que la física de la luz es?

¿Y si existe alguna relación entre nuestro crecimiento biológico, físico y mental, condicionado por el Sol?, ¿se debería en parte a lo que ingerimos?, ¿mayor es la relación directa de biomoléculas fotovoltáicas en el alimento, mayor es la luz que ingerimos?, ¿mayor es la luz que ingerimos, mayor es nuestro bienestar físico?, ¿mayor es nuestro bienestar físico, mayor es nuestra predisposición a una actitud positiva?, ¿una actitud positiva nos condiciona en una conducta constructiva, en un pensamiento positivo, empoderador?, o, ¿será que meditar sobre la luz, la luz de nuestra conciencia, nos conduce a una actitud positiva?, ¿es así que podemos entonces edificar valores positivos y sabios sobre los que construir nuestra personalidad?, ¿o será que la luz la encontramos en todo, y es desde ese todo desde el que podemos evolucionar en bienestar? De esta manera, somos luz y necesitamos de la luz para iluminar nuestro organismo y nuestra conciencia.

Si hasta el momento, toda esta dialéctica de cuestiones se presenta ramificada, antes de irnos por las ramas e instalarnos en la copa, procuremos caminar cada una de ellas en dirección hacia la raíz que las ha traído a su existencia. Descendamos por el tronco, no obstante, y alcancemos un conocimiento al respecto de la luz, desde diversas perspectivas, al menos, aquellas que nos cuestionamos. Posiblemente, desde el conocimiento que al respecto refuta a día de hoy la ciencia, podamos firmemente subrayar aquellas palabras de Jesús de Nazareth: «sois la luz del mundo». ¿Será esto cierto?

por Verónica García-Melero

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