Un fragmento de SHOVAVIM (IX): «Y», la cámara secreta del corazón.

Y vi, yo mismo, que existe más ventaja para la sabiduría que para la tontería, tal como hay más ventaja para la luz que para la oscuridad.

Eclesiastés 2:13

Con ánimo de avivar a mis Ai, os dejo un fragmento de la continuación de Shovavim. Espero que os anime y os haga meditar en la importancia del amor.

Santo Bendito Sea:

En la montaña estamos
para lograrla ascender;
subiendo, la conquistamos
y la podemos entender.

Mucho tiene mi Beth en ella
para poder abstraer
que en ella estamos,
por ella subimos, también:
y nos adentramos en ella
para, Mi Sabiduría, tener.

Y Mi Sabiduría está en Mi Palabra,
en Mi Verbo está Beth,
y está la enseñanza, Zahorí,
de este camino coger.

Es Lámed la última letra
de la Torah, así es.
Y es Lámed la última letra
de Mi Conciencia, Israel.

Es Lámed un límite
que nace junto a mi Beth.
Te hablo del Corazón, Zahorí,
el que renuevas en tu ser.

Y entiendes que el Corazón
es toda mi palabra;
en Vav es que se apoya toda,
pues en su mitad se halla.

Es misterio para quien sube
saber que es Mi Vav.
Es unión, lo que dice,
es "Y", ¿"Y" qué es más?

Es el apoyo que logras,
es la vara, también.
Es el mando que te consigues
al caminarme con fe.

Y es Vav el enlace,
es Vav la Formación.
Es el centro de tu vida,
el centro de tu corazón.

¿Por qué habría de estar
en medio de mi Torah esta letra?
Es el enlace que, tu espíritu
y tu mente, conecta.

Es la estrella que late
en el centro de tu corazón;
así es como te unes,
así nos unimos los dos.

Y recuerda que, en Mi Torah,
Mem Torah es la enseñanza;
es la instrucción que a Mí te une
al nadar en Mis Aguas.

¿Habrás de purificarte
al subirme con fe?
El Mishkan de ti se trata,
con "Y" lo vemos también.

Mas, de esto te hablaré luego,
ahora, recuerda, Zahorí,
la importancia que tiene Mi Verbo,
más te diré de Mí "Y".


¿Entiendes que Mi Nombre
es tu trabajo, en la tierra, hacer?
Has de integrar Mi Unidad
para lograr entender.

Y cuando el entendimiento
ha alcanzado tu corazón,
Mi Sabiduría, que es Árbol de Vida,
te es revelación.

Así es que sientes que todo,
todo se mueve contigo.
Estoy en toda Mi Creación,
en tu corazón Estoy, cariño,
cuando te conectas con Mi Corazón,
cuando te conectas Conmigo.

Es esta conexión "Y",
"Y" es lo conectivo;
es corregir tus emociones
cuando vivo contigo.
Es entender Mi Palabra,
es entender la Formación.
Es el Árbol de la Vida
y toda su floración.
Es la estructura primigenia,
es unión y desenlace.
Pues, a raíz de esta "Y"
es que todo se hace.

Es "Y" todo Mi Verbo.
es "Y" todo mi ET.
Alef Tav, principio y fin,
lo logran comprender.

Así es que es todo Mi Árbol,
en la Unión Conmigo está;
está mi "Y" en tus células,
sí la vuelta le das.

Es "Y" tú ADN
evolucionado en Mi Luz;
es "Y" todo Mi Verbo
y, como ves, eres tú.

Y es Vav Mi centro,
es Vav Mi mando,
es Vav tus emociones
cuando te Estoy llevando
de la mano, así te llevo,
siempre te sujetaré
porque has alcanzado En mi montaña
dilucidar qué es Mi Beth,
y Mi Lámed, y Mi Verbo,
¡has entendido Mi Palabra!
Y la has entendido porque, Zahori,
conmigo caminas y hablas.


Estoy Yo por que te involucres,
no Estoy Yo por tanta alabanza;
por el aprendizaje activo Estoy,
en buscarme es que me hallas.

Y se me busca corrigiéndote,
subiendo Mi Montaña, así es;
y teniéndome presente
en todo tu quehacer.

Estoy, entonces, en Tiferet,
¿en dónde, si no, podría estar?
Es la belleza del alma
la que me logra enamorar.

Ahora, si nos detenemos
en el regreso a casa,
de mis Rujot, el 69
es quien lo traza.

¿Qué te dice 69?
¿Son 42 y 27?

Es En la montaña 207
y es la Luz también.
Y es mi Rujot, doblando Mi Áleph,
207 que es Yo veré.

ראה, mi Rujot,
te lo hará entender.
Y es la casa mi templo,
es la Unidad Conmigo,
es Ver el Camino a Casa
lo que te digo desde el principio.

Así En la Montaña,
En la Montaña está Beth,
y está la enseñanza que logras
al subirla con fe.
Es la enseñanza Lámed,
qué hace Mi Corazón
cuando late junto al tuyo:
es caminar con Dios.

Ahora, traza Mi Camino
en medio de tu corazón.
¡Qué no te extrañe, Zahorí,
AMAR por solución!

Zahorí:

¡Siga, hablándome, Santo!
¡Siga hablándome de "Y"!
¿Hay alguna enseñanza
que la una a Mishpatim?

Pues, por Vaeleh comienza
este trocito de Su Corazón;
¿No es "Y" un lazo que une?
¿En qué son unión?

Santo Bendito Sea:

Justo antes hemos contemplado
la semilla que logramos plantar
cuando subimos En la Montaña,
"ser iluminado" es su afán.

Es En la Montaña, tanto,
que se resume en Ver.
En Ver tu corazón mientras caminas,
y Ver Mi Corazón, también.

Así, si te ilumino,
mi aliento despierto en ti
en otro nivel del alma,
te he doblado mi Alef, sí.

Yo veré es que te dice
al unirlo a Mi Ver.
Y tu corazón te ha dictado
el profeta que lees.

Es 53 lo que pesan
estas tres letras que encabezan
las tres razones por las que bajé:
hacerte subir, iluminarte, ver tu conciencia.

¿Y cómo es que han aparecido?
Aferrándote a la Vida.
Dejándote, por Mí, llevar,
esa ha sido su dicha.

¡Es 53 tanto,
tanto es en Mi Palabra!
¡Son los 53 Mitzvot de Mishpatim!
Y de la reencarnación es que tratan.

Pues, hablan en lo profundo,
Zahorí, de tu despertar;
de saber que eres un alma
que tiene que, el cuerpo, domar.

Así es que en Mi Corazón se halla,
caminando a Mi Casa,
el AMAR imperativo,
el anhelo del alma.

Es Vav quien une
mis 10 Palabras con Mishpatim.
Mis estatutos, en lo profundo,
¿qué más querrán decir?

No te quedes en la superficie,
el Pardés vive en ti.
Pues, me has despertado
para hacerme Vivir.

Zahorí:

En Yitro aprendemos mucho,
mucho que es Contigo.
Nos instruye en acercarnos a Ti,
cómo relacionarnos, su sino.
En lo profundo habla de esto:
de nuestra relación con Dios
para lograr iluminarnos
al poner atención.

Son las 10 palabras
las que nos hacen crecer
y lograr renovarnos
al, la Vida, coger.

Pues, el Árbol de Vida
Tú eres quien lo revelas;
y revelas el Pardés
y conocemos las estrellas.
Nada he aprendido,
todo lo has dispuesto Tú
al moverme el amor
y sentir tu quietud.

Todo en mí se halla
al revelar Tu Luz,
delante de mí caminas,
eres la exactitud.
Y sé que de la mano me llevas,
en el amor está la virtud
de iluminar mi conciencia,
de guiarme tu Luz.

Y, en Mishpatim, por esclavo entiendo
el doblegar ciegamente mi alma
a mí cuerpo, que es caprichoso,
el ego es quien lo trama.

Observo la importancia
de relacionarme con otro,
las disposiciones reglamentarias,
en lo profundo, son oro.
Están por recordarnos
la importancia de la persistencia
de continuar construyendo fe:
es un nivel de conciencia.

Nos recuerdan que, con el otro,
aprendemos a crecer.
En dominar nuestro cuerpo
está este quehacer.

Doblegar nuestro cuerpo
a nuestra alma, su esencia.
Persistir en el espíritu
es mucho de su ciencia.

Entonces, más comprendemos
porqué estamos aquí.
Somos alma, somos conciencia,
unidos estamos a Ti.

Y es una realidad plena,
eres la Verdad, sí.
Llevado de tu mano consigo
Ver la Luz que hay en Ti.

Y, en tu Luz, Santo,
la oscuridad se desvanece,
aflora la claridad y verdad
caminando Contigo siempre.

Eres la Luz que todos
albergamos en nuestro ser.
Somos la chispa Divina
qué Tú logras prender.

Y es fácil lo que la prende,
lo que la hace avivar.
En resumen, esta "Y"
bien la sabe elevar.
Hablo de nuestra Luz Divina,
la que se halla en nuestro interior.
Es una estrella que late
en el centro del Corazón.

Y, como hemos aprendido,
¿en qué podría estar?
Eres Santo bien sencillo,
ellos está en AMAR.



Santo Bendito Sea:

El amor-único es mi esencia,
el amor-único es Mi Luz.
En AMAR, como has dilucidado,
está la mayor virtud.

REH y LEV juntos hacen
la razón de tu ser.
32 el corazón pesa,
Mi REH 206.
238 resumidos
en el 13 que lees.
Ahavah y Ejad son ellos,
Amor y Unidad, ¿lo ves?

Y si quieres ser simple,
Ver con tu corazón
es la enseñanza suprema
en tu camino con Dios.

Pues, recuerda el camino a casa,
es algo que lleva marcado
en el centro de su ser,
por Mi fuisteis creados.

Soy una Gran Conciencia,
Soy la Fuente de Luz,
Soy el Verbo manifestado,
Soy Emet, su virtud.

En el centro de Mi "Y"
están Mis Aguas: la Luz.
Son Árbol de Vida
para que me entiendas tú.

Aférrate al amor,
en él está mi Unidad
y dejarte llevar por Mí,
el Árbol de Vida verás.

Come de sus frutos,
lo he dispuesto en el Pardés.
Sólo el amor y Unidad en Mí
lo logran entender.

Deja que Yo te lleve,
Yo te sujeto, mi amado,
eres un alma despertada,
elegida por Mí: tu regalo.

Zahorí:

¡Gracias, Santo! ¡Eterno!
¡Gracias por este regalo!
En mi corazón yo te siento,
y siento que soy tu amado.
Y en mi alma, igual, te siento,
y siento que es tu regalo.

¡Del brazo Tú me llevas!
Con tu diestra me has tomado,
y has hecho que me apoye en Ti,
Tu "Y", yo, he tomado.
Está la "Y" en tu Nombre,
para hacerlo en mí, mi agregado.
Es Musaf este destino,
es principio del regalo.

Pues, cuando prendo tu vara,
cuando tomo tu Palabra,
Tu Verbo es que comprendo
y su conocimiento me aguarda.
Y guiado es que me siento,
siento que porto Tu Espada;
doble hoja es que tiene,
y tiene que está afilada.

Es, Tu Palabra, la espada
que me viene a defender
y me guarda y me es refugio
y me hace entender.

Esta "Y" que aquí hallo
bien me viene a hablar
de transformarme en mi camino
de crecimiento espiritual.

Más aso yo esta espada,
más luz llega a mí
a través de corregirme
y sentirte en mi vivir.

Es sencillo ver ahora
esa Hei final
que me habla de renovarme
y sentir que conmigo estás.

Esta Hei final de tu Nombre,
es la Hei que hago en mí,
es completarme viviendo Contigo
y haciéndote vivir en mí.

Es, entonces, tabernáculo,
es, entonces, Mishkán;
y es Tu Arca, Tu pacto,
y encenderme, Tu Menorah.
Toda esta construcción que dictas
en nosotros es que está.

¿Habré de construirte un templo
para vivirte en mi interior?
De Luz es que Tú lo llenas
al concederme Tu Amor.

Santo Bendito Sea:

Mas, no sólo Yo lo lleno,
lo llenamos los dos.
Mi Luz en ti Yo derramo,
si la prendes, corazón.

Y tu amor a Mí te ha llevado,
y lo he venido a purificar.
Ahora entiendes que en amarme,
más amor sientes, tienes, das.

Es tu Yo Superior quien construyes,
es un nuevo estado de conciencia
que sabe revelar mi Verdad,
tus sentidos interiores aciertan.

Igual es que te elevan
y te hacen entender
el mundo del alma que habito
y que vive en tu fe.

Es algo metafísico,
tus corazón y alma lo ven,
y tu conciencia, si en Mi pones,
te lo hará comprender.

Yo Soy Unidad,
Yo Estoy Contigo,
Yo Soy en ti,
cuando eres uno Conmigo.
Es la Verdad, es así.

Y sientes y vives el milagro,
toda física transciendes
cuando te echas en Mis Brazos
en confianza y me sientes.

Y la has transcendido porque te llevo
del brazo, mi Zahorí,
y te has apoyado en mi Palabra,
y te hago vivir en Mí.
Mas, Mi Palabra es un Paraíso
que está en el recibir
mientras subes la montaña
y te adentras en Mí.
Y es Árbol de Vida,
Yo Soy quien lo revelo;
la espada ardiente que lo protege
te ha hecho paso, mi cielo.

Pues mi Árbol de Vida
está en tu Emunah;
dejarte llevar por Mis Brazos,
saber que Conmigo estás.
Y hará aparición Mi Sabiduría,
contigo está y estará.

Pues, sólo se revela
a quien sabe caminar
teniéndome por lámpara
y dejándolo guiar.
Es hacerte a un lado,
es, Zahorí, la humildad
y el apego a la misericordia
y a la bondad, por igual.

Siénteme en tu corazón,
siénteme con tu hijo;
en el amor es que me encuentras;
de Luz te cubro y lleno, su sino.

Siénteme en tu alrededor,
Todo se mueve Conmigo.
Siénteme en el amor,
allí estoy siempre, querido.

Y, ahora, que hemos avanzado,
reflexionemos qué es Terumah.
¿Crees que hay más de Mi "Y,
habrá algo más que conectar?

De Shovavim hemos salido
para volver a empezar
a corregir tus emociones,
tu Yesod, ¿y que más?













Con inmenso amor a יהוה, a mi hijo y a mis Ai.